jueves, 21 de mayo de 2009

La gripe catódica

SONRÍE, LA TV TE AMA

Odio las notas que presentan una columna nueva enumerando objetivos y propuestas. Dicho enumeremos objetivos y propuestas de esta entrada.

En diciembre de 1956 se inauguró el primer canal de televisión uruguaya (Canal 10), un acontecimiento seguido supongo por muy pocos aparatos a válvulas en blanco y negro que demoraban un buen rato en prenderse. La programación sólo cubría unas pocas horas desde la tarde hasta la medianoche.

Muchas cosas cambiaron ahora que prácticamente todos los hogares tienen uno o más televisores color y muchos de nosotros podemos ver decenas de canales durante las 24 horas. No sólo la imagen es mejor y más atractiva. Ahora, para nosotros mirar televisión es una cosa muy distinta a la que era hace décadas. Usamos ese electrodoméstico de una forma muy diferente y buscamos otros mensajes en sus programas.

No soy semiótico ni sociólogo ni politólogo -esto último por desgracia; haría buena guita esta temporada- pero soy blogero (sonó a barrabrava). Intentaré no pudrir a nadie reflexionando sobre la "caja boba". Comentando programas puntuales, sí. Pero también tratando de pensar acerca de lo que recibimos.

En los primeros años la TV era como una rareza, como un juego. Algo así como el Play Station donde el nene miraba dibujitos a la hora de la leche o el adulto se entretenía un rato después de volver del trabajo (el hombre) o de terminar su tarea doméstica (la mujer). Todo el mundo tenía sus programas preferidos y solía encenderla para ver ESE programa y apagarla al terminar. Incluso, había gente "hincha" de uno de los canales; solía ver la programación de ese canal preferido porque le gustaba más ese "estilo" que los otros.

Con los años no sólo los cuatro canales -únicas imágenes disponibles, aparte de algún privilegiado que agarraba televisión porteña- cambiaron. También la composición de la familia, el tiempo libre, los roles de ambos sexos, las salidas sociales y la crianza de los niños.

¿Entretenimiento?. ¿Cultura?. Mmmm... la concepción artística que suelen tener los programadores y/o dueños de los canales es más bien similar a la de Julio Ribas. ¿La televisión nos estupidiza, nos baja línea, nos impone modelos o solamente es una buena compañía?

¿Los noticieros y los periodísticos nos dicen la verdad?. ¿Nos mienten a propósito?. ¿Son objetivos?. ¿Son honestos?. ¿Se suben al carro?. ¿Estoy realmente informado con los informativos de lo que pasa?

Hoy hay muchos tipos de programas inimaginables en aquella televisión blanco y negro: los reality-shows, las transmisiones de fútbol en vivo de los campeonatos de todo el mundo -bueno, no todo- series de documentales, bloopers. Se permiten cosas que antes estaban prohibidas en materia de sexo y violencia y ésto es buen negocio. Muchas cosas parecen haber cambiado: las seriales y las películas son subtituladas y se repiten en otros horarios, las señales transmiten las 24 horas, tenemos canales de otros países -pero nuevamente, no de todos- hay más posibilidades para el televidente. Los niños nos miran con lástima cuando les decimos que en nuestra infancia sólo estaban el 4, el 5, el 10 y el 12.

¿Pero no será todo una cuestión de gatopardismo? Cambiar algo para que nada cambie...

Telenovelas brasileñas, concursos españoles, antiguos desastres (Don Francisco, Grandes valores del tango), los criterios para exhibir películas, magazines matutinos... temas hay de sobra.

La semana que viene -si no me echaron- voy a referirme a los programas de Rial y de la "pelirroja" Canosa (valga la paradoja).

En los tempranos años 90, en un curso de crítica cinematográfica dado por el gran Luis Elbert -un saludo para él- en Cinemateca Uruguaya, nos informaba que un estreno que tuviera un éxito monumental en salas de cine llevaba 150.000 espectadores pero en cambio, cualquier película emitida por "Gran lunes" en canal 12 no bajaba de 250.000 televidentes. Sin embargo, los diarios tienen comentaristas de cine y no de televisión.

P.D.: También voy a comentar publicidades. Aprovecho para comenzar repudiando a un comercial de Chevrolet donde una pareja joven se mira dudando hasta que arremete con el auto de la marca pasando por adentro de una torta gigante de casamiento, de donde caen millones de confites. He ido a muchos casamientos -por suerte a ninguno mío- pero nunca vi una torta de relleno tan repugnante. ¿Cuál es el mensaje del referido aviso?. ¿Los autos de las otras compañías cuando chocan contra una torta de 5 metros de alto se revientan?. ¿Si no te querés casar, comprate una Chevrolet?

9 comentarios:

perezvila™ dijo...

en mi cabeza suena, con sabor a merienda
este es el show de xuxa, te saluda con amor.

(18 hs, canal 12 de lunes a viernes)

perezvila™ dijo...

y digamoslo.
habría ganado defensor

Detaquito dijo...

Linda columna señor Fagalde, aguardamos la de la proxima semana!!!
me interasa lo de la publicidad.


Opa hay horoscopo hoy!

Y ganó Defensor!

Que le depararan los astro al violeta?

Detaquito dijo...

Quedo debiendo una S

Ce dijo...

En mi cabeza suena la voz grave que acompañaba una placa antes de cada bloque de "Cine para adultos"

(sábados -o viernes?- en canal 4 a las 12 de la noche: la única posibilidad semanal de ver una teta durante un par de segundos en la tele)

Bestiario dijo...

Interesante columna, o prometedora mejor dicho... como todo buen capítulo capturó mi atención.
Ya que habla de cursos de Cinemateca, por casualidad ¿no estuvo en el curso del 2007? yo sí, por eso la pregunta...
Nos vemos en las próximas emisiones, a la misma hora en el mismo canal

Alvaro Fagalde dijo...

No estuve en cursos de Cinemateca en este siglo. Pero prometo volver a hacer alguno cuando supere los 55 años. Puede ser un buen lugar de levante de chicas otoñales.
Ce: a medianoche en el viejo canal 5 -cuya imagen solía saltar intermitentemente- solían pasar películas culturosas con desnudos totales... quizás ahí empezó mi interés por Cinemanteca

Alvaro Fagalde dijo...

Un saludo para los tuertos.
Hoy todos fuimos antifutbol.

andal13 dijo...

Estupenda columna, Álvaro.

Ay, pensar que en mis tiempos había 4 canales, a todo blanco-negro-grisecitos, la programación empezaba a las 6 de la tarde y las películas se marcaban por "rayas"...
¡Qué tiempos aquellos!*



*Que tiempos de mier****, quiero decir