CULTURA REGIONAL
Para lograr un entendimiento
cabal de como es que el don o la doña lograban dar con la música y otras
cuestiones culturales, es importante aclarar que en aquella época (digamos 1900
a 1920, 25 con toda la furia) la música y las distintas manifestaciones culturales en general, no gozaban de
los medios de comunicación con los que si contamos nosotros hoy día para poder
ser compartidas.
No existía ni el bip bip, o sea que la gatita con la que salías no te podía avisar en ese preciso instante que arrancaba el toque de Bing Crosby (ver video de referencia en minuto 2:32). Ni el Movicom, ni los guolman Sanyo
con pasa cassette y una Bic siempre a mano porque si se te daba por rebobinar el TDK 90 te comía toda la pila. Tampoco tenían el popular correo electrónico de Yahoo!.
Como mucho el periódico que te demoraba en llegar
un montón y además, cuando llegaba te lo alcanzaba el perro todo lamido y
babeado.
Por lo que el conocimiento y en este caso los gustos y estilos musicales se agrupaban básicamente por regiones, lo que se dice en la cortita.
Lo que pasaba en el sur del país angloparlante era bien diferente de lo que pasaba en el suroeste o en la costa oeste o en el norte industrial, y no había forma de enterarse inmediatamente que era lo que en ese preciso momento hacía mover la patita en otra región, estado y/o/u localidad. A no ser, claro, que uno fuese Spock y utilizara el Transporter de la USS Enterprise para moverse de un lado a otro. Ahora, si uno no era Spock se tenía que conformar con lo que había en la tavuel.
El blues, por citar un ejemplo, estaba asociado a Chicago, Memphis y Saint Louis. Todas estas, ciudades pertenecientes a estados del centro-noreste de los Estados Unidos, formaban una de esas regiones con una identidad musical y cultural propia, como veníamos mencionando. Quienes realizaban el trabajo sucio viajando de aquí para allá eran los músicos que giraban en torno a esa región, tocando en un bolichito por acá, en una fiesta por allá, siempre llevando su música como método evangelizador.
Pero por suerte para los zapatos de los músicos, los mercaderes de la música y el resto de los mortales, el desarrollo de la radio y por sobre todo de la radio como medio de entretenimiento no tardó en llegar jugando un papel más que importante en la creación de lo que sería una cultura a nivel nacional que atravesaría a todo el país norteamericano.
HE AQUÍ ALGUNOS PRECURSORES
Todos sabemos quién fue Alexander Graham Bell, pero no nos interesa. Quien sí nos ocupa es Guillermo Marconi, que habría inventado la radio para luego patentarla en 1897. Aunque algunos dicen que los verdaderos inventores fueron un tal Tesla y un supuesto Cervera. Pero quien le puso el circulito con la R adentro fue Marconi, así que a chuparla Tesla y Cervera. Ahora... ¿Qué nos interesa de este lío de vedetongas digno de Intrusos? Nada. Simplemente nos sitúa en lo que fueron los comienzos de las primeras transmisiones radiales, allá cercano al 1900, destinadas, en sus inicios, al campo de batalla y a las comunicaciones marítimas.
Otro a tener en cuenta es David Sarnoff, un bieloruso devenido en norteamericano que inició su carrera como empleado en las estaciones de Marconi para luego pasar a ser el fundador de la Corporación de Radio de América (EE.UU.) y de la Compañía de Radiodifusión Nacional. ¡Ah, claro! Dirá usted apático. Pero si yo le digo que son la RCA y la NBC respectivamente, tal vez le suenen un poquito más. ¿No?
REDES NACIONALES (networks)
Para comienzo de los años ´20 las estaciones de radio empezaban a poblar las principales ciudades norteamericanas y ya para finales de la mencionada década, a tomar color las cadenas o redes nacionales de radio tales como NBC (del bielomericano Sarnoff) y CBS, matando de a poquito a la radio vecinal como veremos más adelante. O no.
Para hacer funcionar a esta red nacional de estaciones radiales se las conectaba vía telefónica las unas a las otras y así generaban el tan mágicamente alcance nacional con el que la gente se fascinaba. Imagínese a usted (no, mejor imagine a alguien más agraciado) en 1927 sintonizando la radio en la comodidad de su casa en Chicago y poder escuchar en vivo y en directo lo que en ese preciso momento escuchaban en un club de New York. Algo realmente sorprendente. Pero la cosa no se quedó ahí amigos: para lograr aún un mayor alcance se conectaba a las estaciones radiales con una mucho más potente en cuanto a señal y así comenzaron a llegar a todas partes del país derribando las tan mentadas diferencias regionales en pos de una audiencia nacional.
Donde pongo el oído, pongo la canción: este cambio de paradigma en la cultura musical norteamericana fue muy bien aprovechada por los productores que en lugar de amedrentarse con las grandes cadenas de radio, las utilizaron a su favor haciendo que transmitieran sus canciones a nivel nacional y así generar el deseo irrefrenable en las personas de comprar cada vez más y más libritos con canciones que al fin y al cabo era lo que los hacía ricos.
Y en una nueva entrega: El empalagoso sonido del Pop I
7 comentarios:
Bien AmI, bien...y Nueva Orléans?
En otras cosas, entré para hacerle un homenaje al wendy de la gente por su reciente consagración académica y veo que he perdido mis poderes...andate Bonomi!
Un saludo para el gran wendigo2 entonces, quien sin tanta alaraca ha podido extirpar una tesis de su colon...enhorabuena!!
yo pensé que por lo de cultura regional ibas a hablar de Níquel o de Sylicon Fly.
Se comió los mocos Marconi. Recién patentó la radio en 1987...
Te afanaron la radio venila´ buskar.
Aguante el Marconi!
Maicol del
Marconi.
Me encanta tu propuesta, coequiper Evil. Te dejo mi humilde poronga, espero no lo tomes a mal
Evil contigo a full hermano
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