Quizás por considerarlas una extensión de su propia anatomía, nuestros nobles guitarristas han dado por apodar a sus guitarras según los criterios más variados. Entre muy aburridos apodos provenientes de la simple forma o aspecto del instrumento, como la "Blackie" de Clapton, o la "Polka Dot Strat" de Buddy Guy, se encuentran algunas historias dignas de mención. Como mera excusa para escuchar unos buenos solos, repasamos algunas historias de esas que no le interesan absolutamente a nadie. Elegimos, claro está, las que tienen que ver con minas...
Probablemente la de apodo más famoso, el bueno de BB llamó “Lucille” a su guitarra más conocida. En cierta ocasión, rondando 1949 y actuando en Arkansas, el local en el que se encontraba tocando el moreno elemento se incendió, pues se cayó un barril de kerosene que usaban para calentar el lugar. Una vez desalojado, notó que se había dejado la guitarra adentro, y volvió a rescatarla, casi muriendo en la incidencia (o ese es el color que le dan las crónicas). Indagando en los orígenes del siniestro, le contaron que el fuego lo habían iniciado dos tipos que se peleaban por una mina, tal vez el motivo más noble para prender fuego un bar. De aquí a que la mina se llamaba Lucille y en homenaje a esto el rey del blues bautizó de esa manera a su guitarra, hay un renglón. Casi 20 años después, en 1968, edita “Lucille”. La primera pista, de nombre homónimo, rinde el merecido reconocimiento: “Me imagino que todavía se preguntan por qué la llamo ‘Lucille’ / La mina que empezó la pelea esa noche se llamaba Lucille”.
STEVIE RAY VAUGHAN
El menor de los Vaughan contaba con dos guitarras que se volverían su marca registrada. La de apodo más conocido, pero que menos nos gusta, la obtuvo en el ’80, cuando su mujer Lenora se la regaló luego que este la viera, usada, en una casa de empeños de Austin, Texas (a la guitarra, ta claro). Lenora pidió prestados $ 50 a 7 personas para pagar los $ 350 que costaba, porque no tenían un mango. Como reconocimiento al anhelado obsequio, la bautizó “Lenny”. En el ’83, cierra una pista con ese nombre el imponente álbum debut de Stevie Ray Vaughan and Double Trouble, “Texas Flood”. En el 2004, fue subastada en $ 623.500.
"Lenny", El Mocambo, Toronto, 1983
Demostrando una vez más que un vello pubico femenino tiene más fuerza que una yunta de bueyes, el líder de ZZ Top bautizaría “Pearly Gates” a su guitarra en honor a una historia amorosa. Quería comprar una guitarra, pero no tenía la guita. Lo que sí tenía era una novia que quería ir a California a conseguir un papel de actriz. El le prestó su Packard modelo ’36 para que se trasladara, algo que no deben imitar en sus casas. Ella le devolvió el favor vendiendo el auto a buen precio, y le mandó la guita para que se comprara la guitarra, que se la había apalabrado al dueño sin tener la menor idea de dónde iba a sacar los washingtons para pagarla. El auto se apodaba “Pearly Gates”, y el mismo apodo heredó el instrumento.
"Sharp dressed man", Eliminator, 1983
JOHN FOGERTY
Al fin un hombre con motivos de hombre. Luego de una vida entera escuchando hablar de béisbol, Fogerty grabó su disco retorno de 1985, “Centerfield”, tras 9 años de alejamiento, quemado con la industria discográfica en general y con sus ex compañeros creedence, a quienes no demoraría ni entonces ni hoy en denominar "una manga de soretes" en perfecto inglés. Fue ese deporte el tema central, desde la tapa donde yace un guante, hasta la historia que cuenta la pista que da nombre al disco sobre un beisbolista que está en el banco para saltar a la cancha y dar el punto glorioso como en las películas. Para celebrar el éxito del álbum, se hizo construir una guitarra con la cual interpretar la pista en vivo. Fue apodada “Slugger”, dado que está fabricada con un bate Louisville Slugger, el más famoso fabricante de bates de béisbol del mundo.
"Centerfield", SoundStage Studios, Chicago, 29/11/07
Y usted... cómo le pondría a su guitarra?
15 comentarios:
Yo le pondría Carlos.
Creo que el martes es el día más fuerte del blog.
Lo que no sé si habla bien de los martes, o mal del resto de la semana.
Seguramente en honor a una ex pareja. Lo cual es bienvenido aquí, dado el conocido caracter gay friendly de este espacio.
Yo Leonora, si mi marido le pone Lenny a una guitarra en mi honor, pido el divorcio. Es sobrenombre de hombre o de puto de los Simpson, y en cualquier caso, totalmente inaceptable.
Yo le pondría "Pocha" Fernandez o "Loco" Rotela.
Excelente!!
Y uno se cree que las guitarritas son solo un instrumento para los músicos.
No, no, son una compañera de ruta, de la vida, que hasta tiene nombre.
yo le pondría miss beckinsale
Es espectacular ésta columna, casi la leí toda. Ojalá de chica me hubieran hecho escuchar más B.B. King y menos Elton Johnes o Rod Stewarts, ahora estoy pagando las consecuencias.
Luis, ésto de los nombres se da solo con las guitarras?
O, por ejemplo, quienes tocan los bongos también les ponen nombre?
Zorro: essssselente apodo!!!
Ele: Elton y Rod no ponen apodos, son las musas inspiradoras.
Dulci: no hago columnas sobre bongós. No me caen bien los bongoístas, sobre todo el pelado Ray Cooper, ídolo de multitudes.
Dije bongos, pero podría haber sido armónica, pandereta o violoncello.
Quería saber si en otros rubros también apodaban a los instrumentos.
Que mostro Billy Gibbons.
Cuenta la leyenda que Gillette le ofrecio un monton de plata para hacer un reclame donde se afeitaba su barba (junto a su amigo bajista) y los mando a cagar.
Aprende Aguirre.
esselente nédota,Nin (saludos a Novoa)
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