jueves, 10 de marzo de 2011

Robándola, pero con códigos



La verdad, todavía no sé bien quién tuvo la genial idea de que yo empezara con esta columna. Es que al final de cuentas, hasta que no me suba al avioncito, no voy a tener nada interesante para compartirles, y una vez que esté arriba del mismo, ya me importará poco y nada el destino de esta columna (chascarrillo).

Fuera de toda broma, cuando uno la roba tiene que reconocerlo, y éste es el caso. Ocurre que las regalías de AdSense que me brinda el señor director del blog son lo bastante generosas como para andar incumpliendo con el horario semanal, y eso ha generado este monstruo: una seguidilla de relatos inconclusos intentando despertar el interés de los internautas.

Pero hoy hemos decidido venirles de frente, serles sinceros: no tenemos nada para escribir. Quizás sea el hecho de haber pasado carnaval en Montevideo, o que JR haya claudicado en su filosofía de juego (y de vida) ante el genuflexo de Enríquez, pero hemos despertado a la realidad, y no les mentiremos más.

Y si durante el viaje estamos entretenidos buceando entre los arrecifes de coral, o tomando sol en Bali, y usted ve que es jueves a las 21.05 y no hay columna, no espere hasta 21.10. Apague la computadora y váyase a dormir (u otra cosa si no se acuesta a las nueve como yo). Porque la columna no va a aparecer.

Que todo sea para bien.

6 comentarios:

alf dijo...

Si tengo que pagar por esto, pagaré.

Nacho dijo...

Muy bien

El editor dijo...

Ah, yo creo que no. Es tuya y en hora. ¿que mas podemos pedir?

Internauta Rebelde dijo...

Un Nevada?

Bestiario dijo...

Pero hablá de JR tranquilo, dale, no tengas miedo... contanos todo lo genial que es ¿vos lo ves como el mesías también?

ana inés dijo...

Asi se hace, se roba pero siempre dando la cara y con la frente bien en alto!