Doce días en el exterior y ya soy casi un experto. Atrás quedaron aquellos primeros días de incertidumbre, cambios constantes y asombro ante cosas nuevas. Durante la última semana ha habido tiempo, por fin, para uruguayear un poco. Una docena de noches fuera de uruguay y ya soy un experto en darme cuenta la inutilidad de conseguir wifi gratis en algún sitio que no sea un McDonald´s.
Fue así que el jueves 24 llegamos a Queenstown, capital del deporte aventura. Lamentablemente, la mayor aventura fue pagar una “multa” de 50 dólares cuando por enésima vez nos colamos a un camping para bañarnos, con la poca fortuna de hacerlo en el baño de señoritas, lo cual provocó un escándalo de magnitudes insospechadas. En cuanto al deporte, no tuvo el espacio que solicitaba, por lo que tanto bangee, paracaidismo, parapente y anda mais, quedaron para nuevos destinos. Punto para la noche queenstoniana, que disfrutó de nuestra presencia durante 3 noches seguidas. A destacar las bailarinas que sin mediar aviso compartieron un topless con el público, lo que desató la algarabía de los asistentes.
Durante ese lapso de tres días hubo tiempo también para pegarse una escapada hasta Fiorland, donde se encuentran los populares fiordos (Milford Sound – Seno de Milford). Básicamente, se trata de valles antiquísimos, que en algún momento se vieron rellenados por agua del deshielo de los glaciares. Además de fiordos, también hay senos, que son más o menos lo mismo, pero el agua ahí no baja sino que entró hace un tiempito desde el mar. Vale aclarar que de día vimos solamente fiordos, y que el nombre de Milford Sound, además de no hacer referencia a parte alguna de la Sra Milford, está mal puesto, ya que no se trata de un seno sino de un fiordo.
El domingo entonces partimos temprano para Dunedin, ciudad universitaria y residencia de la fábrica de Cadbury. Para los que se están haciendo preguntas, van algunas de las respuestas más frecuentes:
1 – Sí, en Queenstown nos rascamos bastante el higo y básicamente no hicimos un carajo además de salir de noche.
2 – Sí, fuimos a una ciudad universitaria el único día que nadie tiene clases.
3 – En Cadbury no regalan chocolates, vale 3 dólares la tableta.
Siguiendo con Dunedin, dimos una vuelta por una Iglesia y luego jugamos unos pools. El sistema es al menos novedoso: en vez de canaletas que hacen perder las bolas en el vacío, hay unas redes que las dejan a tu alcance, y podés hacer con ellas lo que se te antoje durante una hora.
El lunes, Montcook, hicimos una caminata de 3 horas hasta el lago, sin mucho para rescatar además de los siempre peligrosos puentes colgantes. De ahí fuimos a Tekapo, donde supuestamente había un lago muy lindo, pero no me animé a entrar temeroso de perder mi virilidad a manos de quien le puso el nombre al pueblo.
De ahí en más, vuelta a Christchurch, devolución del Motorhome, noches en aeropuertos, y llegada a Sidney, que es parecido a Disney pero un poco más caótico. Todo eso y mucho más, el próximo jueves a las 21.
7 comentarios:
¿Hay boicot a las columnas de Alf?
y esos carné de prensa andan o que ?
capas que quedaron mal ...
aguante ALF
Te faltó pasar las tarifas de las trolas, para hacer el IPT a nivel mundial.
Sí, demostrá que para algo te pagamos la universidad y andá armando algún índice... El precio de las trolas, de la mandanga, del tinto suelto, de la entrada a la ásterdan, del chori, del chinchulín, de la Canarias Mezcla Serena, elegí vos y demostrá toda tu capacidad. Confiamos en vos, loquito!
Sería algo así como una canasta básica de joda, habría que definir los coeficientes de participación de los rubros integrantes de la canasta, onda, 30% alcohol barato del lugar, 20% falopa, 20% Trolas, 20% zochori o símil del lugar, 10% varios como timbas clandestinas coima pa lo milicos que te agarren choreando, etc. así que dejate de andar visitando laguitos y dedicate a lo que realmente nos interesa que por algo te financiamos el viajecito
no sé ahí, lo que es acá son las 8.30 de la noche
a las 8 de la matina me levanto para ver al bolso
Grande Alf
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