lunes, 29 de noviembre de 2010

Padres primerizos. Pará, pará, pará… ¡De sacar tantas fotos!


De los 35 milímetros al megapixel

Ahora está de moda que el registro del pequeño retoño, sobre todo para los papis más potentados, arranque con la ecografía 4D.

Para los que nacimos en la década de los 80 o incluso antes, el álbum de fotos era un objeto suntuario. Las limitaciones técnicas (el rollo más grande era de 36 fotos, que me desmienta Perezvila si me equivoco), sumado al elevado costo del revelado, contenía la pulsión paternal de inmortalizar cada mínimo instante transcurrido.

Estaban marcados entonces algunos hitos como “la salida del sanatorio”, “el primer bañito”, “la visita del tío Pocho que vino de lejos”, “el bautismo, para los creyentes” y una acotada lista de etcéteras.

En definitiva, la foto tenía un valor testimonial que se regulaba solo. En el mejor de los casos, el primogénito lograba completar un álbum de cien fotos antes de culminar la escuela primaria.

Lo máximo a lo que uno podía aspirar era a que le hicieran un lindo mural. Con suerte a color, si la familia andaba en una buena racha económica.


Fotogénicos

Pero hoy la fotografía digital, con cámaras cada vez más accesibles –incluso con celulares con cámara a precios promocionales- acompañado por el acceso a los medios de almacenamiento (PC, Pen Drives, tarjetas de memoria) y la popularización de Internet, rompió el dique de contención que tenían los padres primerizos, dejando al pobre botija expuesto al peor de los flagelos: la baba de sus propios padres.

Puede que las dos o tres primeras horas de vida nos cuidemos y sigamos la famosa recomendación “no le pongas flash, que le hace mal a los ojitos”. Pero ni bien empiezan a caer los parientes de visita en el sanatorio, al primero que le zampa el fogonazo, ya se relaja la cuestión y viva la pepa, dale que es tarde, a flashear al bebé que se acaba el mundo.

Entonces le creamos una cuenta de google, o foto blog o peor, subimos 1500 fotos del pobre inocente a Facebook. Teras y teras de vida digitalizada sin ton ni son, sólo porque es gratis.

¿No será hora de reflexionar al respecto? Ni sueñe con la utopía de sacar 500 fotos para luego seleccionar “las más lindas”. Su hijo o hija le parecerá maravilloso aunque esté completamente fuera de foco.

Parafraseando el slogan que lucha contra la tenencia de armas, yo le diría a los papás primerizos: “tenés una cámara digital, tenés un problema”. En serio, ya no da para andar persiguiendo a la pobre criatura por todos lados cual turista japonés en la Ciudad Vieja. Llega un momento que el pobre se fastidia, y con razón.

Padre, madre (tutor o encargado), desconéctese. Haga la prueba. Sáquele las pilas a ese instrumento del demonio. Arroje el celular bien lejos y siéntese a contemplar así, en vivo y en directo, a esa criatura que no para de crecer y cambiar. Dele un poco de crédito a su memoria y verá como no se arrepiente.

16 comentarios:

Ce dijo...

Gran columna.

Yo prohibí por bastante tiempo que le sacaran fotos a mi hija y también denuncié a un familiar que cargó en su Facebook fotos de mi gurisa sin mi consentimiento.

Juan Domingo dijo...

ahora seeeee!
no sabes como precisaba esta columna!

resulta que Evita en mayo 11' va a dar a light dos peronistas, una peronista y un peronista, para ser mas exactos...

asi que Maca, si no es molestia, no podras duplicar el flujo de las columnas al doble? necesito hacer un curso intensivo...

igual fotos no les vamos a poder sacar dado que ambos tendremos ambas extremidades superiores ocupadas...

en fin, ya se, suertempila, ya me lo dijeron...

Vidiella dijo...

un pastabásico más en el mundo y otra atorranta.
ou margot.

Vidiella dijo...

ahora sí.
Linda columna Maca.

Mi primer cría fue retratada con las cámaras tradicionales. Todo bien.

Con la segunda cría, saqué un montón de fotos (unos dos rollos, que como bien decís eran un montón en la era pre-cámaradigital), y cuando las fui a revelar la cámara se había roto y sobre exponia. Dos rollos de 36 imposibles de ver, y los primeros 3 meses de mi niña eran sólo recuerdos de un desmemoriado.
La puteada se escuchó desde el Cerro y tuve que comprar una cámara digital.

Igual no saqué tantas fotos después de eso. Por costumbre, vió?

Alvaro Fagalde dijo...

Sos un zorete, Ce.

Alvaro Fagalde dijo...

No tengo hijos pero me han emocionado en los cumple de 15 de hijas de amigos ese momento en que pasan todas las fotos de la homenajeada desde que era un bb.

Coincido en que 40 fotos x día es mucho y rompen lo eggs.

Alvaro Fagalde dijo...

Juando: el domingo el Flu sale campeón!!!

SofíaBD dijo...

por este medio le aviso al sr Besti que no me vuelve a tocar un pelo hasta que no se termine esta racha exponencial de concepciones en los ambitos de lectores del blog

atte

Nacho dijo...

Ay, dolió

Alvaro Fagalde dijo...

No es una buena tactica, Sofia. Aca hay varias que quieren que el Besti le toque todos los pelos.

Vidiella dijo...

ojo Sofia, una vez dije eso y cuando las hormonas hicieron lo suyo terminé cambiando pañales a la tierna edad de 19 años.

Dobleveo dijo...

Felicidades Juando!!!

Lindo tema para tocar Maca, yo lo que creo es que hay tiempo para todo, para contemplarlo en vivo y para dejarle recuerdos para cuando sea grande.

Mis viejos eran un desastre en ese sentido, desde que nací hasta los 7años tengo sólamente dos fotos.

Andrés Reyes dijo...

Felicitaciones a la familia peronista.

Respecto a los flashes, y la cantidad de fotos por día, creo que a medida que uno y el númeor de hijos crecen, van bajando tanto las restricciones flashísticas como la cantidad de exposiciones a la que es sometido la pobre criatura.

Si uno tuviera tantos hijos como la señora de la columna de dugui, seguro que termina por no sacar ni una puta foto.

Benja dijo...

Muy buena columna.

La verdad hasta el día de hoy me gusta mirar mis albumes de fotos de cuando era chico.

Me acuerdo como envidiaba a los que tenían camara de filmar, en mi casa no eramos tan afortunados pero un día mi viejo muy astuto "alquiló" una para mi cumpleaños de 4 años que lindo aquel video de toda la familia reunida y mi viejo a los gritos atras de la camara.

Recuerdo como si hubiese sido ayer cuando mi vieja descrubrió que mi padre había grabado encima de "LA" filmación de mi infancia los juegos olímpicos de Atlanta 96...

Gracias viejo por inmortalizar aquellos épicos juegos olímpicos.

Macarena dijo...

¡Qué cálida bienvenida!

Así da gusto volver.

Otro flagelo de la fotografía familiar que omití en la columna: el que saca la foto nunca sale.

Recuerden pedirle a algún amigo, familiar gamba o transeúnte con cara de honesto que retrate a la familia en pleno de vez en cuando.

En lo personal, la relación fotos con papi - fotos con mami, es de 10:1 ¿Adivinen quién saca las fotos?

Prometo contemplarla más, sin flashes. En eso estoy :)

fernando dijo...

Buenísima!

Mi primo batió record al respecto. Tiene una foto del espermatozoide fecundando en el acto, lo que luego sería su hija.

Se la hizo sacar teniendo relaciones en un tomógrafo. Es el colmo.