Cualquier cosa te llamo... (1era Parte)

De todos los inventos tecnológicos del siglo 20, quizás el que mayor penetración (con perdón de la palabra) haya tenido en la gente, después del televisor, creo que es sin lugar a dudas el teléfono celular.

Así como es de masivo podemos decir que lo es de superfluo. Y el protagonismo y la importancia que hoy tiene se lo hemos dado nosotros, que lo usamos a mas no poder y después, con culpa, renegamos del mismo.

Muchas costumbres, buenas o malas, las hemos adquirido por su uso. En mas de una usted se podrá ver reflejado, estimado lector. O quizás en ninguna. En ese caso nos preguntamos para que mierda tiene celular.

-Problemas de memoria. Y no me refiero a la memoria del celular si no a la nuestra. Haga usted la prueba. Va a ver que es incapaz de retener 8 dígitos en su cabeza por mas de diez segundos. 4620-9354. Listo, a ver repítalo... sin mirar... imposible. Para que vamos a ocupar KB de nuestro cerebro para almacenar información que guarda tan amablemente nuestro amado aparato? Eso si.. el día que lo perdemos quedamos incomunicados. No nos acordamos ni del teléfono de nuestros progenitores.

-A la hora de ir a comer afuera el celular influye para elegir la locacion. Antes deciamos: "Vamos a lo del gordo que hacen buen asado" o "Vamos a lo del Tano que hacen los mejores ravioles". Ahora el menú no importa tanto, vamos a lo de el Rengo que tiene el mejor WI FI del barrio. Y ya, en lo del Rengo, ves mesas en la que pocos se miran a los ojos, la mayoría están revisando sus mails, pelotudeando en feizbuk, o mandando guasap a todo el mundo diciendo que estas en lo de El Rengo y que la estas pasando genial. 

-Al momento de internarnos en el baño para vaciar nuestras tripas, el celular es un aliado fundamental. Ni hablar si tenemos conexión WI FI. Chequear mails, mirar algún capitulo de nuestro programa favorito, insultar a algún miembro de este honorable blog, son de las tantas cosas que podemos hacer para amenizar el tramite. Cuando al salir, tu jermu te pregunta como te fue, rengueando porque se te durmieron las piernas de estar sentado le decís feliz: "Bien... me hice 3...

… 3 niveles de candy crush"

-En el Laburo, un caso particular es el de aquel compañero de oficina que usa un ringtone para notificación de SMS. Generalmente usa una canción completa y generalmente también sale a deambular por la oficina y deja el celular en el escritorio, por lo que le entran sms y por cada sms nos tenemos que fumar la 9 sinfonía de Beethoven completa, o en el peor de los casos algún gran éxito de Reggaeton.

-Una que nunca falla. Puede ser que cada vez que llames a tu mujer, nunca atienda a la primera vez? El teléfono lo tiene sumergido en ese extraño océano que es su cartera. Si bien la cartera tiene miles de bolsillitos que podrían albergar cálidamente al aparato, ella lo integra al sin numero de porquerías que tiene habitando en el bolso.

Lo mas triste es que una vez que te atendió, lo vuelve a sumergir en ese mundo, si la querés volver a llamar porque te olvidaste algo, lo mas probable es que vuelvas a padecer la misma desgracia.

Y eso si, si cuando ella te llama vos no atendes, lo primero que va a pensar ella es que estas en una orgia con dos gemelas suecas, un enano travesti, un perro doberman y una bolsa con medio kilo de merca.

Con los usos y costumbres del celular hay mucha tela para cortar, y últimamente mi inspiración viene en picada como Independiente de Avellaneda, así que vamos a dejar material para una segunda parte, el jueves que viene a esta misma hora.