Grandes Amas de Casa de ayer, hoy y siempre Volumen 2

Estamos de vuelta, estimadas amigas. Directamente desde Atlanta, Gerogia, con la segunda parte de Grandes Amas de Casa de ayer, hoy y siempre. Dicen que segundas partes nunca fueron buenas. Esperemos que esta sea la excepción a la menstruación, digo, a la regla.

María Inés Obaldía

Esta gordita simpática (así la llamó el cantante español Julio Iglesias en aquel recordado programa de entrevistas Caleidoscopio que ella misma conducía) sí que conoce el arte de la palabra. Comunicadora nata, decoradora idónea y, según dicen, experta también en las artes amatorias.
Supo ganarse su lugar en nuestros corazones y en todos aquellos eventos de estos últimos años organizados por presidencia que necesitaren de una animadora locuaz.

¡Grande Inés!

Margaret Thatcher

También conocida como la dama de fierro, dirigió la gran nación británica con mano dura y semblante rígido, aunque por dentro era tan tierna como la propia Blancanieves. Así es, sus tres mascotas delataban su dulzura: un conejito blanco (Pompy), un gatito siamés inquieto (Timmy) y un patito marrón de plumaje cuadriculado (Mortimer).
De todas formas, su cargo la obligaba a verse como tal. Seria, gesto adusto (un saludo para él), líder irrefutable del imperio. Un ejemplo para muchas.

Juana de Ibarbourou

Poetiza oriental, de caligrafía exquisita, poderosa y sensual, supo ganarse el título honorífico de Juana de América. Sus poemas no eran gran cosa, seamos sinceros. Por ejemplo, en La Higuera:
Aunque es áspera y fea,
Aunque todas sus ramas son grises,
Yo le tengo piedad a la higuera...

Y bueno..., pero ganarse su fama y credibilidad en un mundo machista como el Uruguay de aquella época, vamos, démosle algo de crédito. Eso sí, preparaba un puchero que te volaba los mocasines. Su Puchero Juanete tiene hoy su lugar bien ganado en las páginas del libro del Crandon.

Curiosidad: existe una leyenda urbana la cual reza que Juana era muy, muy bajita. Error. Su estatura era normal. La confusión del término poetiza con petiza generó el mito.

Mecha Bustos

Dios la tenga en la gloria, con su archifamoso "Hola Jjjeberrrrrr..." en aquel recordado Decalegrón, hizo las delicias de grandes y chicos. ¿Quién no recuerda también aquella perfecta imitación de Alba Roballo? Aaaaaa... cuando el humor en la Tv era algo sano. No como ahora que es pura guarangada, insultos y minas en bolas.

Curiosidad: Su apodo no es atribuible a su nombre, sino a una aflicción que sufría de pequeña: le tenía pavor a los fuegos de artificio. Cada vez que veía una bomba brasilera, traque, cañita voladora, etc., corría rauda para hacerse de las mechas y evitar que sus traviesos vecinos practicaran la pirotecnia.

China Zorrilla

De nombre de pila desconocido y apellido ilustre, esta noble mujer que para muchos es inmortal, ha logrado ganarle a la vida. Así es, no hay quién pueda con ella. Dicen que hasta el propio Gardel le tiró los galgos.
Actriz polifacética, teatro, cine, tv, super 8, etc. etc. Trabajó en todos los formatos de espectáculos que la humanidad ha conocido. Y sigue. Se fracturó la cadera hace poco, y sigue, y sigue. China, ¿hasta cuando? ¡Ojalá que hasta siempre!

Curiosidad: Nadie sabe porqué habla igual que Carlitos Persiavalle.

Y por supuesto que hay espacio para muchas más Amas de Casa de ayer hoy y siempre, así que amigas, esperamos sus sugerencias y comentarios para posibles futuras entregas. Muchas gracias y como dicen aquí: "see you soon!"