Y se terminó el Campeonato Uruguayo en su fase regular (el vocabulario del cable se nos ha pegado definitivamente) con la presencia de este servidor cubriendo las instancias desde el lugar de los hechos, cámara pedorra inclusive. Llegamos muy sobre la hora, y no nos perdimos nada del partido por dos circunstancias circunstanciales, no valga la redundancia:
Primero, que el 151 iba como pedrada por razones muy ajenas a nuestro entendimiento. Quienes también vivan en Sayago -que no son pocos en este blog- saben bien de qué hablo. Segundo, que al llegar a la única puerta por donde podía entrar la populosa parcialidad albiverde no había nadie para ingresar y el agente me registró un poco por aburrimiento. Dicho sea de paso, me parece a mí que podría haber pasado cualquier arma más pequeña que un lanzamisiles por la forma que me revisó.
El partido en sí fue bueno, en mi humilde opinión, con dos cuadros desparejos en lo institucional, tanto como en el monto de sus hinchadas -vaya novedad- pero que intentaron ganar, que es la condición más importante para que el fútbol sea atractivo. El problema de los campeonatos que organiza Tenf..., digo la AUF es que de un lado atacaban Zalayeta, Pacheco, Urretavizcaya y el "Japo", que andá a saber si salió con el hermano de chofer y del otro Zabala, Nicolini, Affonso y el hijo del presidente, que no juega mal, después de todo.
Las jugadas de gol se sucedieron más o menos en forma pareja, con ambos equipos tratando de jugar la pelota en forma prolija, que es lo menos que se le puede pedir a dos cuadros profesionales que están peleando uno el título y el otro, ingresar a una copa internacional. La cosa cambió cuando cerca del final del primer tiempo Urreta aprovecha un excelente pase de Aguiar -si no me acuerdo mal- y define messianamente ante el achique del golero rival. 1 a 0, el título que se venía y -como siempre que el grande se pone en ventaja- la cosa que se le complicaba al chico para salir a buscar el imprescindible empate.
Un penal dudoso, que difícilmente le cobren a un grande, 2 a 0 y parecía que era el fin de todo. Juventud y Danubio no perdían y nosotros que nos recibíamos de grado 5 de cuadro infeliz. En el minuto 89, descuento y empate en el tiempo adicional y el tristísimo consuelo de que seguimos con estadística favorable ante Peñarol en lo que va de este siglo. Terminamos últimos en el Clausura (o segunda rueda), siendo que con un (1) solo puntito más nos clasificábamos. Notable.
En resumen, un partido abierto, bastante bien jugado, con cuatro goles que pudieron ser más. Si bien cualquiera de los dos podría haber ganado, es indudable que el aurinegro tuvo mucho más situaciones de gol y se perdió varias probablemente porque Jorge "Japo" Rodríguez desayunó ese día café con leche y no lo de siempre y porque Zalayeta es Zalayeta. Si Peñarol metía uno más goleaba seguro y si Racing hubiera descontado antes, andá a saber qué pasaba. Todo lo demás es puro verso. El lunes me tomé un café en McDonald y leí el Ovación del día. 18 páginas dedicadas al campeón del Clausura y todo eso, con varios reportajes que repetían exactamente los mismos conceptos y ninguna (0) referencia a cómo jugó su rival. Decí que en la ficha del partido están obligados a poner el nombre del club y de los jugadores, que sino...
También le saqué fotos para esta edición a la escultural Sara Foster. Yo tampoco la conocía pero el otro día veía una de esas películas que pasa el cable que ni sabés para que la mirás, con Owen Wilson (un cómico que una vez sola me hizo reir pero no recuerdo cuál) y Morgan Freeman. El film no se estrenó acá, lo cual sólo es de lamentar porque es la única producción importante en la que aparece Sarita, que como comediante está bastante simpática. Es una modelo californiana en pareja con el carilindo tenista alemán Tommy Haas, que no sé si sigue jugando o no, y a nadie le importa.
El criterio gráfico de esta columna incluye además de a la chica con nombre de yerba a una ilustración que grafica claramente el sentimiento que hoy tiene el hincha racinguista y un par de fotos realizadas con mano maestra por quien les habla en el partido citado. Probablemente a algunos les excite más la foto de la rana.
Ya he escrito bastante sobre el tema y no pienso insistir demasiado. Jugaban Pescara y Bolonia la segunda final para definir el último ascenso en el fútbol italiano a la primera división. El Pescara tiene camiseta blanca y azul a rayas -últimamente el azul es más bien celestito- y el cuadro de la ciudad comunista por excelencia de la península viste de rojo (o granate) y azul. Más distintos, imposible. Así jugaron la final de ida. Pues bien, a la vuelta el Pescara jugó de amarillo.
Vo, príncipe jordano mamadereado por Maradona y del cual nadie se acuerda su nombre: si querés tener los votos de Perú, de Qatar y de Sayago, arreglame eso. Basta con las camisetas de visitante. Que cambien cuando sean iguales y nada más.
Comienza la Copa América. Muchos medios deportivos mediocres -valga la redundancia- dedican la mayor parte del tiempo a discutir a ver si Uruguay llega como favorito o no, lo que me cerepa bien al dope. La celeste consiguió ser la última campeona sin haber, por cierto, arrasado con todos sus rivales, excepto extrañamente a Paraguay en la final. Viene sin su máxima figura pero con su mismo exitoso DT y una interesante renovación, especialmente en ofensiva. Punto.
Creo que el 99,9 % de los uruguayos estamos de acuerdo en que queremos que salga campeón cualquier cuadro que no sea el local. Todos somos pilladitos, la verdad, pero lo de los hermanos chilenos raya en la peor esquizofrenia. Teniendo menos títulos continentales que Perú o Bolivia, tienen un agrande mayor como si tuvieran más títulos que Alemania y Brasil juntos. Nadie puede imaginarse lo que podría pasar si se les da. Por lo pronto, mucha violencia callejera en Santiago. Con decirte que creo que preferimos que gane una Argentina reforzada con Chiellini, Evrá y la prensa inglesa.
A mí es un campeonato que me encanta y la competitividad de casi todas sus selecciones -salvo Jamaica que está puesta claramente para cagarnos el debut- asegura el buen espectáculo y nos da la razón a quienes pensamos que esos 4 puestos y el repechaje para Uruguay para los mundiales no son muchos. Digo yo, que no sé un joraca de fútbol.
11 comentarios:
Preciosa columna. A Jonathan Fuentes en Sayago lo quieren un montón, no? Ese penal los dejó afuera de las copas...
Digo, fue bastante más que ese penal, pero si no hubiera sido por esa manito andá a saber qué pasaba.
Fue todo el campeonato, no tiene nada que ver el juez.
Fuentes, la reputisima madre que pariò, chorro de mierda!!!!
Sarita me pone, de aquella manera....
Una lásitma ese penal que -a mi entender- fue inexistente. Fue un muy lindo cotejo, los dos propusieron pero Peñarol generó muchas más chances. Zalayeta despegado. Me dio pena que Racing no clasificara. Es un equipo al cual aprecio mucho.
Esta vez sería una de esas pocas veces que quiero que salga campeón laaargentina, así los shilenos no se la sacan más de adentro
A mi tampoco me cae bien el agrande de los chilenos, pero me estoy empezando a cansar también del tono burlón que están teniendo muchos periodistas deportivos uruguayos. Me gustaría escuchar los comentarios de estos ilustres conocedores del fútbol y de la vida si Chile llega a salir campeón. Hablan como si por su pobre historia no fuera posible que Chile gane la copa. Yo creo que además de ser locales tienen muy buen cuadro, y junto con Colombia, Brasil y Argentina son candidatos. Me parece perfecto que en las apuestas estemos por detrás de ellos, lo que indigna a nuestros periodistas. Que al final son tan "objetivos" para ver el fútbol como los chilenos de los cuáles se burlan.
Grande Piqué, ha logrado su cometido, tener a todo el madridismo picado y que lo odien! Grande!
Toy solo Sara. Shamame.
Estuve todo el miercoles pensando que era jueves. Por eso publiqué ayer.
Así está la salud en este país...
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