Un Silvio que no es Mendes

Una vez más, cantó Silvio en Uruguay. A mucha gente le gustó, a otra también y a otra tampoco. Yo no fui. Y me hubiera gustado ir porque me gustan mucho algunos de sus discos. Hay que reconocer, sin embargo, que Silvio ha sido siempre una figura polémica. Algunos lo rechazan por ser un músico de la revolución cubana. Otros, en cambio, lo rechazan porque es "poco" revolucionario. Mi viejo, por ejemplo, no lo soportaba porque decía que Silvio es un vende-patria. Según la teoría conspirativa que mi viejo usaba años atrás, Silvio estaba vendido al imperio, y sólo Pablo Milanés, Noel Nicola o más tarde, Santiago Feliú, merecían el estatus de músicos de la revolución. Otra gente le ha pegado a Silvio en direcciones diferentes. Por ejemplo, cuenta la leyenda que el Choncho Lazaroff solía decir que Silvio sí era un músico de la revolución, aunque no de la cubana, sino de la francesa.

Fuera de Uruguay he conocido gente que asocia la música de Silvio con un romanticismo revolucionario adolescente. Eso es, con un estereotipo de gente joven “galeanizada”, por decirlo de alguna forma. La idea es que los que escuchan a Silvio andan, de alguna forma, rodando por el espacio como una bolita de carne sabrosa y salsosa, una sola bolita caliente que resplandece.

Pero aunque exista algo de verdad en esas críticas, es difícil generalizar en esa dirección. Si nos remitimos a lo estríctamente artístico, podemos decir que Silvio ha compuesto tanta, pero tanta cosa, que su música trasciende a ese tipo de objeciones. Sus canciones tocan un montón de temas que difícilmente puedan ser catalogados de simplones. Además, yo me pregunto: ¿Y qué si Silvio se cansa y se va de la isla a vivir a Panamá junto a Rubén Blades? ¿Qué problema hay si su música cautiva el espíritu más revolucionario de las masas de quinceañeros y quinceañeras?

A mi el Silvio que más me gusta es el del disco Mujeres. Creo que ese disco tiene algunas de las mejores canciones de amor que se han escrito en nuestra lengua. Canciones como Ya no te espero o En estos días, son dos temas que no deben faltar en el bolso del caballero o en la cartera de la dama enamorada. Y esa misma sintonía, Silvio ha compuesto canciones preciosas como Pedacito de papel al viento, Toti o Si seco un llanto, sólo por mencionar algunas.

¿Y a usted que le parece? ¿Le gusta la música de Silvio? Si la respuesta es afirmativa, ¿qué tema le gusta? Si la respuesta es negativa, ¿por qué no le gusta? [Advertencia, si su respuesta es que “sólo escucha música en inglés” ahórrese el comentario, porque usted es un amargo]

Siga el link para ver mi tema favorito de Silvio.

Este no es Silvio, sino Aurelio Martínez, un músico de la tierra de Milton Tyson Nuñez. Ah, ¿no le gusta la música garifuna? En ese caso, hágase picar por el grillo que atendió al Zorro.