Si bien
desde que a la selección le empezó a ir bien dejamos de interesarnos por nuestros
hombres de negro, resulta cuando menos curioso que el Mundial de Brasil vaya a
carecer de árbitros uruguayos. No porque pensemos que el arbitraje charrúa esté
pasando por un momento soñado, sino porque -en el peor de los casos- tendemos a
suponer que los árbitros del resto del mundo no son mucho mejores que los
nuestros. A continuación, un somero análisis de la situación de nuestros
hombres de negro y de todo lo que tendrán que pitar (y correr) para clasificar a
Rusia 2018.
Publicado en Brecha, 31-01-2014.
"Muy bien Larrionda,
muy bien cobrado el penal".
muy bien cobrado el penal".
(Javier Máximo Goñi , 2006)(i).
¿Vocación
o necesidad?
Para quienes nunca pensamos seriamente en dedicarnos a arbitrar,
puede sonar extraño que alguien halle placer en hacerse putear cada fin de
semana, a cambio de unos pocos pesos y viéndose sometido a una
preparación física que gracias a los avances de la tecnología se ha vuelto cada
vez más rigurosa(ii). Detrás quedaron los tiempos de los árbitros petisos y/o
regordetes que arbitraban "con carpeta", a distancia, casi sin
moverse del mediocampo. Ahora hay que ser un atleta que dos por tres sopla un
silbato, gesticula y exhibe cartoncitos de colores, si es que quiere aparecer
en los replays para que Scelza pueda admitir "el árbitro está mejor
ubicado" ante una jugada polémica.
Crecí suponiendo que el árbitro era un futbolista frustrado,
quien con tal de poder vivir la fiesta desde adentro se exponía a sufrir
indescriptibles vejámenes que no pocas veces han derivado en amenazas de
muerte. Tampoco descartaba la posibilidad del deportista con vocación de
militar que podía dar rienda suelta a sus berretines autoritarios: el árbitro
central manda incluso desoyendo a sus asistentes (subalternos), y en ningún
otro deporte el árbitro parece tener tanta incidencia en el devenir del juego,
ni tanta capacidad para hacer prácticamente lo que desee dentro del campo,
sometiendo a los jugadores a su fallo inapelable. La posibilidad de verse
rodeado de policías con escudo en casi todo momento también fortalecía esa
visión del árbitro "miliquero".
Pero tras haber intercambiado un par de palabras con algunos
árbitros uruguayos, llegué a la conclusión de que quienes ejercen el referato
profesional en nuestro país tienen algo así como "un fuego arbitral"
que les recorre el alma. Nadie llega a arbitrar un mundial sin esa fuerza
interior que te lleva a sacrificarlo todo por una profesión corta que no te
dará de comer.
¿Qué
se necesita para ir a un Mundial?
"Por más obvio
que parezca, para arbitrar un mundial primero hay que recibirse de
árbitro" explica Igor Moreira, árbitro asistente de primera categoría.
"Para eso hay que pagar una matrícula en la AUF, cursar dos años en la
Escuela de Árbitros, y salvar pruebas físicas y técnicas que vislumbren que ese
estudiante de reglas de fútbol puede llegar a ser un árbitro".
Luego comienza un largo camino en
el que el jovenzuelo se desempeña indistintamente como árbitro central o
asistente, en partidos correspondientes a las divisiones juveniles de nuestro
fútbol. Recién al ascender a segunda categoría (antes el colegiado debe pasar
por la cuarta y la tercera) debe optar entre ser árbitro o ser asistente.
"A esa altura de la carrera, el árbitro ya está definiendo si desea
arbitrar o si, por el contrario, decide que su carrera estará en la línea de
banda", explica Igor.
Tras algunos años arbitrando partidos de la C o de
tercera división, y si todo va bien, el joven silbato puede llegar a la primera
categoría de nuestro referato, donde deberá hacer un gran esfuerzo para
mantenerse e intentar "pegar el salto" a la categoría internacional,
que viene a ser el requisito imprescindible para poder siquiera pensar con llegar
a una Copa del Mundo.
"Estos serían los requisitos
técnicos: conocimiento de las reglas de juego, buena aplicación de las mismas
(demostrado en la práctica en cada partido), buen manejo de inglés
(imprescindible), capacidad de aprendizaje, etc. Todas estas características se
aprenden desde que el árbitro está en la Escuela pero se potencian en la medida
que la carrera va avanzando", sentencia el aguatero Moreira.
Cada cuatro años, a tres de la
celebración de la siguiente Copa del Mundo, la FIFA preselecciona a dos o tres árbitros
y a unos cuatro asistentes por asociación, que son sometidos a una larga serie
de pruebas de toda índole. Muchos van quedando por el camino antes que comience
el Mundial, al que llegan quienes hayan logrado sortear las diferentes etapas
de preparación.
En Uruguay, los preseleccionados
para el Mundial brasileño fueron Darío Ubriaco, Roberto Silvera y Martín
Vázquez. Vázquez fue quien más lejos llegó, logrando pasar una tras una las
pruebas impuestas pese a trabajar 10 horas por día, y pese a haber alcanzado el
límite de edad (45 años) a principios de enero. Pero las lesiones le jugaron
una mala pasada a Vázquez y la FIFA terminó optando por otros 33.
Bien colegiado, bien
Algunos hinchas de cuadro grande de
esos que no destacan por la riqueza de su actividad neuronal afirmaron -ni bien
se conoció la lista de árbitros mundialistas- que sus instituciones de alguna
manera habían tenido incidencia en la decisión de haber dejado a Brasil libre
de silbatos celestes. "¿No me cobraste un penal? Pues bien, te dejo sin
Mundial" era la explicación. Hace unos años, los dirigentes de cuadro grande
se contentaban con "declarar persona no grata" al árbitro, haciéndose
hincapié en que se declaraba persona no grata "al profesional y no a la
persona", como diciendo "como persona es un tipo de aquellos, con
valores, amigo de sus amigos. Pero como árbitro es un reverendo ladrón".
Claro está que ni los dirigentes de
Nacional y Peñarol tienen tanto poder, ni los árbitros son ladrones. Son
personas, y ellos, como nosotros y nosotras, buscan llegar lo más alto posible
en su profesión. Del mismo modo que un relator bronceado intenta llegar a la
cadena Fox, o un lateral izquierdo de Nacional busca desbordar y tirar un
centro como la gente(iii), los árbitros buscan llegar a lo más alto. Y para
estos deportistas (sí, deportistas) lo más alto es dirigir una Copa del Mundo.
Y para ello, tendrán que hacer
malabares para equilibrar el tiempo en la oficina con los piques por el cantero
de Avenida Italia, haciendo coincidir la licencia con los seminarios, y viendo
cómo sus familiares cercanos se ven imposibilitados de entrar a facebook toda
vez que el hombre comete un error (o lo que el comentarista de turno juzga como
error).
Quizás, la próxima vez que le queramos
recordar a los árbitros que sus respectivas madres se han dado a la práctica
sistemática del meretricio porque no echaron a tal o anularon el gol de cual,
lo pensemos dos veces.
Quizás los terminemos puteando
igual, aunque con un poco de culpa.
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(i) El relato corresponde al
penal que sancionó Larrionda en la semifinal que Francia le ganó 1 a 0 a
Portugal, precisamente gracias a gol de penal (bien cobrado) anotado por
Zidane.
(ii) Los árbitros orientales reciben una partida mensual
fija de 3.500 pesos (sean árbitros o asistentes), más lo que sacan "por
partido", que va de $7.000 para un árbitro a $3.500 para un asistente. Es
decir que un árbitro que tenga la suerte de ser designado para dirigir tres
fines de semana en un mes, cobraría unos $24.500 pesos. Cifra que se reduce si
tomamos en cuenta que se juega al fútbol 30 semanas al año, sobre 52 posibles.
(iii) El último lo tiró Carlos Favier Soca en un partido
ante Huracán en 1991.
10 comentarios:
No te gusto el banner de la diversidad? puto! facho, pichón de Cotuño.
Te vamo´ sacar cagando de la Dirección! Viva el Carlismo!
Toda la filial Uruguay del QPR,es Carlista...........
............o sea,yo solo.
Fabián: tu banner va a ser recordado como el único de la historia del blog que no menciona al nombre del mismo. Bien vos.
Ta, mal yo! Me comí el nombre. Game Over
Ya lo había léido en Brecha, porque esto es Defensor y acá se compra este semanario!
Publicado desde mi iPhone 5 de Antel
Con esos sueldos lo único que queda evidenciado es que es más fácil cometear a un árbitro que a un agente de 2ª.
Y quiénes son los que tienen la capacidad y el interés de coimearlos?
Apelo a vuestra indiscutible inteligencia para la respuesta.
Ninguna culpa. Una manga de corruptos del primero hasta el último.
Gol del Coto Correa.
Aguante Terminator Correa nomá
Defensor siempre sacando la cara por el fútbol uruguayo y la gran puta nomá!
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