domingo, 17 de agosto de 2008

Felpita viejo y peludo

Documento gráfico exclusivo de Todo Por la Misma Plata: un imberbe Michael Phelps aprende a flotar en las termas del Daymán durante las vacaciones de turismo de 1997, con apenas 11 años cumplidos (11 para 12).
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Otro testimonio de la grandeza de nuestras tierras. Y de nuestras aguas. Jamás pensó ese niño regordete de visita en nuestro país con su equipo de hocley colegial, que algún día se convertiría en el récordman del deporte mundial. Y mucho se lo debe a la proverbial generosidad de nuestro pueblo.
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Sigue dando criollos el tiempo.

2 comentarios:

fernando dijo...

Si Antonella Escaviavino quedara embarazada de Phelps, y si luego contraen matrimonio, ¿podría Phelps sacar la nacionalidad uruguaya? ¿Podría llegar entonces a competir por uruguay en las futuras justas olímpicas?

Andrés Reyes dijo...

Puntualmente, creo que sí. Aunque seguro que la Federación decide enviar a Picasso, que pinta para campeón... ¿lo entienden? Picasso, pintar... buenísimo.