viernes, 29 de julio de 2016

Salada la canchita: Un film moderno de 1961

En 1979 el estreno de "El árbol de los zuecos", ganadora de la Palma de Oro de Cannes, elegida como mejor film del año por los críticos compatriotas y un interesante éxito de público trajo nuevamente a colación al singular director bergamasco (*) Ermanno Olmi, quien había llamado la atención del público cinéfilo con "Il posto", 17 años antes y no se había vuelto a saber más nada de él.

"El árbol..." era -en mi recuerdo, la vi por única vez hace muchos años- un formidable retrato de la vida campesina sin ninguna concesión a la industria: actores no profesionales, sin héroes ni villanos caricaturescos y donde la lucha de clases  surgía naturalmente de la injusticia presentada como parte indisoluble de la realidad de esos miserables lombardos. Como un film neorrealista en colores.


El árbol de los zuecos
Muchos habían olvidado a Olmi, quien no la había vuelto a pegar desde su segundo largometraje, el referido "Il posto" (que en idioma uruguayo significa "Despertar de ambiciones", tal como se estrenó en el cine Central). Y se siguieron olvidando, porque nunca más se volvió a presentar ni un sólo título de Olmi en la pobretona cartelera uruguaya (o montevideana), pese a haber realizado otros largometrajes tan estimados en el mundo como "Cammina cammina" (1983, sobre la gente humilde que encuentran los Reyes Magos a su paso hacia Belén); "Larga vida a la señora" (1987, similar a "El árbol..., pero en ambiente de sirvientes de un banquete y más sutil) o "La leyenda del santo bebedor" (1989, con Rutger Hauer, sobre una novela del escritor austríaco Joseph Roth). 

"Il posto" (sigamos llamándola así, por Dios), narra el intento de Doménico, un chico pobre que concursa por un puesto (de ahí el título, señores distribuidores) de trabajo que le dé seguridad económica. Cuando empezó la película, uno como buen desconfiado que es, se imaginó que sería otra más de tipos que viven en la miseria, tienen una oportunidad de levantar un poco la cabeza y se la terminan comiendo doblada, pero no es el caso.

Doménico no es un superhéroe. Es un muchacho normal, medianamente inteligente y muy tímido. Mientras da el concurso se encuentra con mayores severos o piolas, algunos un tanto ridículos en su solemnidad pero ninguno será un ogro que intentará hacerlo echar ni arruinarle la vida. Se hace amigo de Magali (y terminará enamorándose, inevitablemente) una chica en su misma posición pero mucho más decidida. La actriz que hizo el papel, Loredana Detto, no volvería a actuar pero se casaría con Olmi. Lástima, tenía una cara de pilla que le quedaba muy bien.

Contra mis pronósticos, termina consiguiendo el trabajo, comenzando desde bien abajo. Se separa involuntariamente de Magali, quien va haciéndose otros amigos y olvidándolo. En la segunda mitad de la película comenzamos a conocer algo de la vida personal de algunos empleados -casi todos bastante veteranos- hasta que uno de ellos termina muriendo, no sabemos si de muerte natural o de suicidio, y Doménico, finalmente, se asegurará el escritorio y el puesto vacante en lo que, aparentemente, es un triunfo personal.

¿Por qué digo en el título que "Il posto" es un film moderno?. Cuando uno estudiaba crítica de cine, una de las primeras lecciones era que todo film se construye a partir de un conflicto que el -o los- protagonista/s deben superar. Algo así como decir -más burdamente- que tiene que haber héroes y villanos como se dijo más arriba. Esta película no hace más que mostrar cómo es la realidad, tal cual, sin pobres tipos que vencen solitos a grandes malvados ni regocijos en la miseria de los que están mal.

Sólo en tiempos más recientes, los espectadores hemos evolucionado lo suficiente como para aceptar historias donde no nos dan todo el mensaje digerido y empaquetado, sino que por el contrario, somos libres de reflexionar sobre lo que estamos viendo, sin infantilismos ni "grandes verdades". 

Torneranno i prati
El camino planteado por este film primerizo será el que continúe Olmi en su carrera posterior: realismo, actores aficionados o que recrean su experiencia personal, decorados naturales. Posteriormente, realizaría mayormente films históricos, donde iría progresivamente dominando una veta cristiana, más mística que institucional y una preocupación ecológica, sobre todo en sus últimos documentales. 

Ha habido elogios para "El secreto del boque viejo" (1993) y "El misterio de las armas" (2001), ya con actores europeos profesionales. Su último largometraje estrenado se llama "Torneranno i prati" (2014), algo así como "Volverán los prados". He aquí un trailer de esta obra del ya octogenario Olmi:


Salada la canchita, una columna que no escatima en gastos cuando de presentar lo último del cine mundial, hoy te trae la película reseñada aquí: Il posto, un film mucho más moderno que la mayoría de los producidos en este año.



(*) Nació en la ciudad de Bérgamo.

BONUS TRACK AUTOBIOGRÁFICO
Viendo "Il posto" no pude menos que recordar cuando yo fui un jovencito no tan tímido que concursó para conseguir trabajo en cierta mutualista. TENÍA que conseguir el empleo porque no daba en casa con el sueldo de limpiadora de mi madre y el de auxiliar de mi hermano -que había entrado de la misma manera tres años antes- y así salí, sin demasiada fe ajena, debo decir.

Allí también conocí a una chica de mi edad, que debo reconocer, fue la primera con la que pude tener una conversación larga sin desmayarme y sin decir imbecilidades para hacerme ver. Obviamente, me enamoré. Yo salvé pero ella no y mi felicidad no fue completa, por cierto. Igual iba a entrar porque ella -a diferencia de mí- tenía suficientes contactos para ello pero dos o tres meses después le diagnosticaron cáncer y murió al poco tiempo, sin que la volviera a ver nunca.

Que una chica me dijera que no cuando yo la invitara a salir (como por cierto iba a hacer con ella cuando la volviera a ver) no me iba a traumar, ciertamente. O que me dijera que era lesbiana o que saliéramos y me decepcionara totalmente. Pero que se muriera... fue fuerte. Todavía veo a la hermana, que sufrió mucho, pero nunca me animé a contarle la historia. Yo que sé.     

11 comentarios:

Unknown dijo...

Yo iba a poner una boludez sobre la rutilante Paulina Rubio y su saludo a Chile en Punta del este durante los premios platino. Pero después de esta historia de amor trunco se me hizo un nudo en algún lado que no logro identificar y mas vale que me calle la boca. Excelente columna Faga

Alvaro Fagalde dijo...

Gracias, Ilich. ¿Quién es la Paulina?. ¿Está buena?

Unknown dijo...

Aah!! Yo le doy

Facundo dijo...

Hermosa columna Alvaro.

Alvaro Fagalde dijo...

Gracias, Facu. No te voy a hacer el chiste facil.

Enanobufon dijo...

Preciosa colugna!! Cuan dificil de llevar es esa mochila de los amores no concretados por diferentes motivos... Hace ya muchos años tuve una historia similar con una compañera de clase que tenia trastorno bipolar, lo que hacia casi imposible llevar una relacion, entre internaciones y curas del sueño importantes.. Pero de todo se sacan aprendizajes y reflexiones.... Gracias por compartirlo!!

Anónimo dijo...

Que triste Faga, hay amores que "mueren" y hay otros que matan

Alvaro Fagalde dijo...

Gracias, Enano y Laura. Ya pasaron 30 años. Si estoy loco, no es por culpa de esto.

Coby Brian dijo...

Excelente colurna Faga!! Es curioso que siempre las tramas de un guión tengan que mostrar antagonismos y "de qué lado me pongo"?? Supongo que sin choque de intereses, no hay tramas... En fin.

Qué historia de vida!! Gracias por compartirla con nosotros. A veces, las personas que aparecen en nuestras vidas en momentos complejos; son las que más nos marcan... Una flor a las que amamos y perdimos...

Pancho dijo...

Excelente columna del Faga como nos tiene ya acostumbradísimos y una historia de vida que nos dejó impactados. Gracias por compartir tanto, no se encuentra esta calidad profesional y humana muy asiduamente.

Alvaro Fagalde dijo...

Gracias por los elogios de dudoso merecimiento.