jueves, 3 de marzo de 2016

La paja es mala - Día 32

Iré al grano: me pesé y adelgacé un quilo de mierda. Me sumí en la depresión. Luego decidí probar suerte en
otra balanza: bajé 3 kilos y medio.

Y ta, no es feliz el que no quiere.


Justo ayer pensaba: ¿a ustedes también les pasa que cuando se bajan una mano, les suceden cosas malas? A mí de chico me pasaba, y llegué a desarrollar "cábalas" bajo el precepto de que si me pajeaba, algo malo me iba a pasar. Incluso hoy en día me pasa que me peleo con la gente, pierdo cosas, me siento miserable.

Por ejemplo, si tenía un escrito importante, una semana antes abandonaba mis artes onanistas. Entonces estudiaba, y estudiaba. Y cuando terminaba el escrito, aquella poco menos que me estallaba.

Lo mismo con el deporte: de chico me gustaba un poco más el fútbol, y en los partidos de la selección no me tocaba en la semana previa a un match decisivo. Recuerdo que en el 2002, el Chengue no había terminado de errar el cabezazo que yo ya estaba saliendo para el baño. Y cuando me tocaba competir (llegué a competir en lanzamiento de bala en el colegio) llegué a estar casi un mes sin sobarme la chota. En las competencias me iba mal pero creeme: estaba seguro de que, sin el celibato manual, me hubiera ido peor.

Cuentemé, usted... ¿también le otorga poderes mágicos a la paja?

7 comentarios:

Ce dijo...

Nunca lo pensé, pero creo que si pajearme me trajera mala suerte ya nos hubiera arrasado un tsunami.

Snyrar dijo...

Ahora entiendo cuando me mordio un tiburon blanco aquel dia en el rio negro. Deci que estaba playito.

Carles dijo...

Cuando era soltero y tenía una cita (cosa que no era frecuente) me hacía una (cosa que es frecuente) para aliviar tensiones. Capaz que por eso no la ponía nunca (cosa que es frecuente(lo de no ponerla nunca)).

Facundo dijo...

En mi pueblo se aplicaba comúnmente el verbo "estar pajeado" a todo aquel que practicando alguna actividad (especialmente un deporte) no tenía una buena jornada. Por algo será.

Carles dijo...

En sintonía con lo que dice Facundo, cuando uno está "con toda la leche" quiere decir que tiene un rendimiento exuberante.

Facundo dijo...

Yo le hacía caso a la sabiduría popular y no me la hacía los días de partido, o incluso el día antes. Creo que algo de cierto debe haber en todo esto. No creo que sea tema de suerte ni que afecte físicamente. Tal vez el tema sea un poco sicológico. O que cuando nos pajeamos no nos importa mas nada, el resto del mundo es como si no existiera y le quitamos la atención a las demás actividades.

Ramiro Roselli dijo...

Pajero el que lee esto.