miércoles, 1 de mayo de 2013

Cinema Soca: Arriba las estatuas vivientes del mundo


Hay trabajos y trabajos. Salir todos los días a cambiarle el foco a la antena de algún rascacielos no es lo mismo que atender la ventanilla de la bedelía de la escuela de bibliotecología. De mismo modo, ganarse el pan como desactivador de minas o como minero debe ser más estresante que conducir el informativo de TeleRocha. Alguno y alguna me dirá, y con razón, que bravo hoy en día es dar clase en un liceo, dirigir a Peñarol o vender enciclopedias Larousse ilustradas en el Cuarenta Semanas. Otros dirán que complicado es ser taxista, guardia de seguridad o peón rural. Sin duda, todas esas profesiones vienen acompañadas de complejidades varias. ¿Qué se puede dejar para aquellos y aquellas que aprendieron oficios que hoy se encuentran perdidos o casi extintos como el de afilador, hojalatero, quinchador, escobero, pregonero, herrero, barquillero o volante de creación?

Un trabajo que me genera muchas inquietudes e interrogantes es el de estatua viviente. ¿Dónde aprende uno a ser estatua viviente? ¿Hay gente que nace con un talento innato para ser estatua viviente o alcanza con dedicación y esfuerzo? ¿Cuánto puede ganar uno laburando en ese rubro? ¿Cómo hace una estatua viviente para no sopapear a todos los irrespetuosos e irrespetuosas que se ríen y burlan de su acto? ¿Qué cosas pasan por la cabeza de una estatua viviente durante su jornada laboral? ¿Qué porcentaje de estatuas vivientes trabajaron como Blandengues? ¿Existe cierta sintonía y simpatía entre la estatua viviente y el Blandengue?

La paciencia y el control físico de una estatua viviente son innegables. Lo mismo que su dedicación. No se puede ser estatua viviente por un rato, sino que precisa tiempo para conquistar a su público. Ser un profesional del estatuismo no es changa. Uno debe soportar el clima, la crisis económica, la gente con malos modales y el tiempo. Porque si a uno a veces se le hace eterna su jornada laboral, ¿Qué se puede dejar para alguien cuya profesión le exige estar inmovilizado la mayor parte del tiempo? 

Por todas estas razones, la película que les quiero recomendar hoy habla de la vida de una estatua viviente. Se titula The Giant Mechanical Man y fue estrenada el año pasado. Escrita y dirigida por Lee Kirk (de quien no he visto otras películas), The Giant Mechanical Man cuenta la historia de Tim y Janice; el primero una estatua viviente y la segunda una muchacha con problemas laborales. Ambos se encuentran en varios tramos de la historia y obviamente terminan juntos. Para ser honesto, no me parece una gran película. Tiene muchos elementos altamente predecibles y facilongos. Sin embargo, sirve para pasar el rato y sobre todo para pensar un poco más en esa enigmática figura que es la estatua viviente. Un gran tráiler se puede ver aquí. No se lo pierda. Evidencia sobre la relación entre una estatua viviente y un blandengue se puede encontrar siguiendo el enlace.   




12 comentarios:

Christián dijo...

Aprovecho para mandarle un saludo a todas las estatuas vivientes que nos leen cada miércoles.

Macarena dijo...

¿Herrero profesión olvidada?

Me mudé frente a una herrería (y tengo el dormitorio a la calle...)

El herrero labura hasta el domingo de Pascua (posta).

Para dormir una siesta tranquilo tenés que calcular la hora a a que sale a almorzar. El tipo es una máquina. Debe tener más plata que los ladrones que le dan tanto trabajo.

Perdón que discrepe, pero es un tema que me toca muy de cerca. El tema, no el herrero. Aviso por si da lugar a comentarios fuera de lugar, como es usual en esta noble publicación digital.

Christián dijo...

Esta bien. Estaba pensando en el herrero que se dedicaba a herraduras. Pero si, tenes razón Macarena.

No entendí mucho lo otro. Que puede llevar a comentarios fuera de lugar?

Macarena dijo...

Ok, tenés razón. Yo estaba pensando en el herrero de las rejas porque me tiene podrida con el piqui piqui todo el día.


En cuanto a lo que puede ser tomado para el comentario chabacano en este blog... todo!

Sabelo que la columna de cine es una de las cosas que más extraño del blog cuando me ausento por un tiempo.

Carles dijo...

hay circulando por youtube un video preciso de un vejiga que hace calentar a una estatua viviente y se come un buen soplamoco.
Tu columna? La razón de mi existir.

Cristian Pérez Muñoz dijo...

Me alegro que te guste, Macarena.

Cristian Pérez Muñoz dijo...

Carles: vi ese video si, una muy bien pegada por una estatua viviente de cowboy si mal no recuerdo.

Unknown dijo...

Cristian, pasá un link pa ver la peli plis.

Christián dijo...

Estimado, no tengo enlace para esta pelicula. Mal yo.

Vesubio dijo...

divinos los trailers. quiero uno de esos galvanizados para la bici.

Unknown dijo...

Estas películas en 5 segundos son la neta!

http://www.youtube.com/watch?v=71LVK5IpL0c

Unknown dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=pubY_siwO7o