La Bohéme

En la fecha que se jugó el fin de semana que acaba de pasar (la primera que se disputa de forma íntegra) se jugaron dos de los clásicos que tiene nuestro fútbol. En uno de ellos el visitante se llevó el triunfo de manera más ajustada de lo que debió merecer. Y en el otro, el local se llevó el triunfo goleando, contando con la colaboración de una expulsión bien decretada. Y además, quedó como único líder. Peñarol y Nacional ganaron también: el primero, jugando 80 minutos para el más absoluto olvido, y el segundo gracias a un penal en los descuentos del segundo tiempo y sin convencer.

El sábado se jugaron tres partidos. En el Franzini jugó Peñarol, oficiando como local, ante Fénix. Los de Capurro llegaban como líderes del torneo, mientras que el carbonero venía de perder con Defensor Sporting y necesitaba el triunfo. Hablando claramente, los primeros 70 minutos del partido fueron más que malos. Peñarol no tenía sorpresa para generar jugadas de ataque y caía siempre en la buena marca de la defensa albivioleta, mientras que la visita no se preocupaba por atacar y parecía irse conforme con el empate. Hasta que, sobre la media hora del segundo tiempo, un gol sacudía la modorra del partido. Un penal a favor de Fénix que Maxi Pérez se encargaba de convertir, ponía a los de Capurro 1-0 arriba. Bengoechea, previo al gol de Fénix, realizó variantes ofensivas como en los partidos anteriores, pero esta vez los cambios resultaron. Los ingresos de Albarracín, Palacios y Luque fueron fundamentales para dar vuelta el partido. A falta de ocho minutos para el final, una jugada iniciada por el ex Wanderers que continuó Aguiar culminó en gol gracias a una buena definición de Ifrán para poner el empate. Y faltando un minuto para llegar a los 45, una gran subida por izquierda de Luque termina en un centro rastrero al medio del área y un zurdazo bien colocado de Palacios para poner el 2-1 definitivo. Peñarol logró un importante triunfo que lleva tranquilidad por haber logrado los tres puntos. En cuanto al juego, para los nombres que tiene, sigue estando en el debe. Fénix, con la derrota, se bajó del liderato del torneo.

En el resto de los partidos, el líder Wanderers goleó 5-1 a River Plate en el clásico del Prado jugado en el Parque Viera. El primer tiempo se había ido con empate 1-1, pero en el segundo tiempo el bohemio se aprovechó del hombre de más que tenía gracias a la expulsión de Cristian González y convirtió cuatro goles. Además, Liverpool obtuvo el primer triunfo del campeonato, tras ganar como local y con un jugador menos durante todo el segundo tiempo por 1-0 a Cerro.

El domingo se jugaron el resto de los partidos. Dentro de los televisados, a primera hora y en Jardines del Hipódromo, se jugó el clásico entre Defensor Sporting y Danubio. Ambos llegaban de sendas derrotas, uno el fin de semana pasado ante El Tanque Sisley, y el otro tras ponerse al día entre semana ante la IASA. No iban ni cinco minutos de partido, cuando iba a llegar el primer gol del partido. Córner de Facundo Castro para el cabezazo de Guillermo Fratta que puso el 1-0 a favor del violeta. Danubio no llevaba peligro sobre el arco del visitante, que parecía quedarse conforme con el 1-0. Con ese resultado se iba el primer tiempo. Al igual que en el primer tiempo, a poco de comenzado el segundo llegaba el segundo para Defensor. Esta vez el encargado de convertir fue Héctor "Romario" Acuña, definiendo de primera a la altura del punto penal. El franjeado se desordenó yendo arriba a buscar el empate, y el visitante lo aprovechó para hacer el tercero. Una buena jugada personal de Felipe Rodríguez que finaliza definiendo de cara externa ante la salida de Torgnascioli y poner el 3-0 en el partido. Cuando el partido no mostraba que pudiera llegar algún gol de Danubio, tuvo dos goles del equipo de Maroñas en los últimos 10 minutos. El primero por parte de Grossmuller de jugada, y el segundo de Olivera de penal. Pero el tiempo no le dio a Danubio para llegar al empate, y el partido terminaría con triunfo para Defensor Sporting por 3-2. Gracias a la victoria, los violetas quedaron como escoltas del líder Wanderers.

Por la tardecita, en el Parque Central, jugaron Nacional y Plaza Colonia. En lo previo, el gran candidato a ganar era el tricolor, que ayer vistió de celeste. Algo que finalmente terminó sucediendo, pero nunca se creyó que le iba a costar tanto. Durante los 90 minutos de partido el libreto fue el mismo: Nacional dominando el partido, generando las chances de gol, pero chocando contra una buena defensa impuesta por los colonienses o contra el arquero Dawson, de gran partido. Plaza generó alguna chance de contra, aprovechando la velocidad de Federico Puppo, pero no concretó ninguna. Y sobre la hora del segundo tiempo llegaría el único gol del partido. Penal sobre Porras que Iván Alonso pateó fuerte y al medio para poner el 1-0, ganar el partido y quedar segundo en la tabla. Ganó merecidamente, ya que fue el único que salió desde el inicio a buscar el triunfo. Pero la falta de generación de juego colectivo hizo que le costara bastante. Plaza Colonia fue a hacer su negocio, y casi lo consigue.

En el resto de los partidos del domingo, El Tanque Sisley ganó como visitante por 2-0 a Rentistas; Villa Teresa y Juventud de Las Piedras igualaron 0-0; y Racing como local volvió al triunfo ganando por 2-0 ante Sud América, en un partido histórico para la escuelita. Con los dos goles que convirtió, Líber Quiñones se transformó en el máximo goleador de la historia del club. 

Esto fue la fecha cuatro, amigas y amigos.