martes, 17 de octubre de 2017

Acerca del problema del doblaje


Si usted es de los que van al cine una vez cada desborde de Espino, quizás no haya notado que resulta cada vez más complicado ver una película en el cine en su idioma original, salvo que éste sea el Español.

Resultado de imagen para Crítico de CineNo sé usted, pero yo no puedo ver una película doblada ("no puedo ver una doblada", gran éxito). Por eso, veo en Netflix o en Qubit, o baj... alquilo las películas que me intersa ver. Porque en lugares como PirateBay, me contó un amigo, la realidad se invierte: resulta mucho más complicado encontrar una película doblada que sin doblar.
Al respecto, los amigos de la Asociación de Críticos de Cine del Uruguay emitió un "manifiesto" que establece, entre otras cosas, que:
"Es entendible que, dada la decadencia del sistema educativo uruguayo, concomitante con la disminución global del hábito de lectura, los exhibidores se hayan percatado de la existencia de un público potencial para versiones dobladas".
Varios apuntes. El primero: ¿estamos convencidos de "la decadencia del sistema educativo uruguayo"? ¿Cómo se mide, quién constata y da fe de que el sistema está en decadencia?
El segundo, y mucho más importante: ¿quién dijo que existe una "disminución global del hábito de lectura"? Porque no dice "lectura de libros", no. Dice "lectura". ¿Cree usted que existe una época de la humanidad en la que los hombres y mujeres hayan leído más que en la actual? Estamos todo el tiempo leyendo. Ver los mensajes pedorros del grupo de whatsapp de fútbol 5, es leer. Leer un tweet del botija de Márama, es leer. Leer una palabra entrada en desuso, como "primus", en una nota pedorra publicada en un blog pedorro, es leer.

Mire si no: "primus".

¿Y? ¿Leyó o no leyó?
Estaría bueno diferenciar "lectura" de "lectura de calidad", por llamarlo de alguna manera. Es esperable que un mensaje de whatsapp tenga menor calidad literaria que un libro, aunque -lo sabe usted muy bien- no siempre ocurre. Hay gente que escribe muy bien por whatsapp, y gente que escribe libros muy malos. Así como el Pato Feo robaba para poder financiar sus sueños literarios, hay otras personas que recorren el camino opuesto: publican libros para poder robar.

No mencionaremos a nadie por respeto a la familia.
En cualquier caso, le juego lo que sea a que usted agarra diez botijas cualesquiera, de cualquier contexto sociocultural, y hoy leen mucho mejor que lo que leían hace 20 años. En particular, los pibes de los contextos más complicados, gracias al Plan Ceibal (que forma parte del sistema educativo decadente del cual nos hablan los críticos) tienen un nivel de alfabetización (digital y analógica) muy superior al que tenían sus padres. Y entre quienes tienen un nivel social menos deprimido, la posibilidad de acceder a contenidos es casi total. Estamos todo el tiempo leyendo, viendo series subtituladas, informándonos viendo los tweets de Subrayado. Incluso nos enteramos de que arranca Masterchef porque Diego González tuiteó. Hace 20 años, nos informábamos viendo la tele o escuchando la radio, veíamos Dinastía doblada, y si lográbamos ver el Castillo de la Suerte, lo hacíamos porque sabíamos que iba todos los miércoles a las 20:30, después de Telemundo y antes de La Hora del Espectáculo. En ninguna de esas operaciones estaba involucrado el acto de leer.
En cualquiera caso, volvamos al principio: estoy totalmente de acuerdo con el espíritu del comunicado: ver películas dobladas, es una bosta. Se pierde la capacidad interpretativa de actores y actrices (si el mexicano que dobla a Pacino fuera tan bueno actuando como Pacino, actuaría él, más que nada porque seguro costaría menos), y resulta molesto (para gente con memoria extremadamente precisa para los temas banales) reconocer que Leo Di Caprio tiene la misma voz que Smithers.
Supongo que hay una cuestión comercial que impera, aunque no le veo un vínculo directo con el nivel educativo de las sociedades. Sin ir más lejos, en España doblan todo (películas, series) y no creo que tengan un nivel educativo marcadamente inferior al nuestro, que estamos acostumbrados históricamente a ver películas con subtítulos, salvo los dibujitos, claro está.
Debe imperar, como también dicen muy bien los críticos, una decisión de política cultural y es el Estado el encargado de tomarla. Porque una vez más, el mercado se ha encargado de demostrar su ineficacia a la hora de tomar decisiones sensibles.
Para ver la versión completa del comunicado, sírvase ingresar a: http://accu.uy

21 comentarios:

alf dijo...

Varios aspectos.

1. Está claro que hoy se lle mucho más que hace 10 años
2. Yo he notado lo contrario, últimamente cuando voy al cine todas las películas son subtituladas, cada vez son menos las dobladas
3. Yo hasta hace un par de años, era hincha de las películas dobladas. Mi argumento principal, que entiendo sigue siendo válido, es que al leer, tengo que destinar la vista a la lectura, perdiéndome así de miles de detalles de gestos faciales, movimientos del cuerpo, luz, escenografía, etc.
4. Hace un par de semanas fui a ver una película al cine y los subtítulos tenían faltas de ortografía y errores de traducción.

Am I Evil? dijo...

Comparar el hábito de lectura no debe ser nada sencillo y argumentar que hoy se lee más que hace 10 o 20 años gracias a las redes sociales, el Plan Ceibal*, etc. es bastante engañoso y pierde de vista la importancia de la lectura para, por ejemplo, la educación.

Principalmente porque las competencias y habilidades que una persona adquiere leyendo un libro o un texto (en sus diversos formatos) no las adquiere leyendo un twitt o un posteo de Facebook, además las finalidades que se persiguen son diferentes.

Luego, diferenciar entre lectura y lectura de calidad en cuanto a contenido o nivel literario únicamente parece, al menos, pobre. Variables como extensión, finalidad y aspectos formales también son importantes.
El lenguaje escrito es diferente al lenguaje hablado, cuando una persona escribe piensa en lenguaje escrito y cuando habla lo hace en lenguaje hablado. La habilidad de escritura que está estrechamente ligada a la habilidad del habla (ya que ésta se desarrolla primero y cuanto más sofisticada, se espera que la de escritura también lo sea, aunque no necesariamente se deben de comportar así), difícilmente alcance un nivel de logro deseado si además no se ejercita con -precisamente- más lectura. Ahí es donde entra el factor “lectura de calidad”. Es difícil pensar que esta habilidad se pueda desarrollar en espacios como las redes sociales donde -además de las faltas ortográficas graves que se cometen- se suele escribir como se habla.
En cuanto al contenido o nivel literario y la habitualidad, habría que separar lectura recreativa de lectura académica. En cuanto a la primera, más allá del primer pensamiento reaccionario que se podría tener con un adolescente que se encuentra leyendo la saga Crepúsculo (pensamiento reaccionario al cual adhiero), la realidad es que es infinitamente preferible que dedique su tiempo libre a ese tipo de literatura que a leer posteos de Facebook, los tuit del gordo González sobre MasterChef o las columnas de Mastandrea en Ovación Digital con todos sus libertinajes poéticos y horrores de sintaxis. A esto, agregarle que cuando hablamos de hábito y de hábito de lectura, un factor fundamental es la extensión y capacidad de concentración que difícilmente se trabajen en los ejemplos citados por Reyes. Adentrarnos en la literatura académica creo que ni tiene sentido.

De todas formas, no me queda clara la linealidad entre bajo nivel educativo, pérdida de hábito de lectura y proliferación de películas dobladas. Aunque, fluidez y capacidad de concentración por fuera del bombardeo constante de imágenes, son elementos importantes a tener en cuenta a la hora de analizar esta supuesta relación.

Finalmente, dado que me tengo que ir a clase, la afirmación acerca de la educación es fuerte, pero para salir a criticarla habría que hacerlo con argumentos. Los problemas en educación son como las brujas, uno puede no creer en ellos, pero que los hay los hay.

*La concepción, la idea que hay detrás del Plan Ceibal es simplemente excepcional, de ahí a que los resultados a nivel macro sean igual de excepcionales creo que se puede discutir. En mi caso personal, la experiencia con mi sobrino en relación al Plan Ceibal, que se reduce a dos escuelas (de 4° a 6°) y a primero de liceo (año que cursa actualmente), no viene resultando para nada significativa. Pero es solo una experiencia personal y hay que tomarlo así.

Andrés Reyes dijo...

Alf: gracias por tus conceptos.

Evil: ¿tenés la versión doblada? Muy largo.

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Borges se ha quejando del doblaje, hace tiempo.
Se han aceptado algunos casos de doblaje, como en Los Simpson. Pero no sé si me convence, con el cambio de canciones que canta Homero. O la incapacidad para entender algunos chistes, como Escuela Elemantal Watson.
El doblaje que acepto es de gato de Srek, Antonio Banderas doblandose a si mismo.

Am I Evil? dijo...

Español neutro, español de España o español argento (a las afirmaciones se le agregan improperios y las palabras se afirman en las "s")?

Coby Brian dijo...

Quiero el derecho a réplica de Fagalde sobre el tema (salvo que él esté tras de esto).

Va mi aporte:

1- Si los "expertos en educación" parar medir la calidad de sus estudiantes se basan en las pruebas PISA (como María Julia y Wilson Netto), qué puede decir la ACCU?? Las dependencias del MEC están cayendo en picada por ser así de simplistas. Pero nada tiene que ver con las cabecitas (eh?) pensantes que asisten. Hablame de cultura, no bajes línea.

2- "Disminución global del hábito de lectura"... Convivo y me rodeo con mucha gente cuyo pasatiempo es la lectura (Libros físicos, EPUBs, PDFs, etc...). Y les da flojera leer los diálogos y seguir una película. Personalmente mi cerebro ya acostumbró la gimnasia esa y no es problema alguno. O que el subtitulo me significa una "guía" para entender los diálogos en el audio original. Si me vas a hablar de falta de cultura de la gente, hablame de que estamos a casi 20 años del 2000 y tenemos personas que precisan traducción de las cosas habladas del inglés al español después de tanta influencia(mismo las películas, música, avisos, videos...) del Norte post-Guerra Fría.

RESUMIENDO: los que les hicieron el estudio de mercado a los cines les están robando la plata!!


3- El Plan Ceibal tampoco es medida de nada. La laptop es una herramienta que, bien utilizada, potencia el desempeño educativo. He visto gurises que le sacaron mucho jugo, como el que tenía la xo para jugar. El primero, es impresionante el camino de ida a las TICs que ha pegado. El segundo se dedica a las letras. En fin...


Para finalizar, los españoles son unos HDPs. Solo a ellos les gusta su doblaje. Si habré comp.. alquilado películas doblada al Castellano

Gracias por el espacio. Voy a leer mis twits al aire de mi programa para fomentar mi hábito de lectura

zorro d colonia dijo...

"Si al doblaje"

Joaquin de Masterchef

Unknown dijo...

La verdad es que las dobladas no las puedo tragar, prefiero que vengan en su formato original.

Facundo dijo...

Dejando de lado la discusión sobre educación y hábitos de lectura, que me parece más que interesante, se puede probar de vez en cuando ver películas de habla hispana. En mi caso es la única forma que tengo de apreciar íntegramente la obra, sin perder detalles visuales, ni la deformación de los diálogos, ni la voz de los actores. En las pocas ocasiones que tengo para poder ver una película tranquilamente, si puedo elegir una latinoamericana o española no dudo en darle prioridad. Hay un montón de opciones. Personalmente si tengo que elegir me gustan mucho las protagonizadas por Emilio Disi,

Unknown dijo...

Esto del doblaje fue por una iniciativa del gobierno de Cristina Fernández hace unos 4 años aprox. para darle trabajo a los actores y actrices argentinos y para proteger la industria del cine. Todo el argumento ese de la lectura no sé de dónde sale pero no tiene asidero.
Lo único real es que los doblajes vienen desde las distribuidoras ya con las películas por un decreto en el país al que se le compra o importa.

Canario dijo...

Vivo a unas cuadras del Costa Urbana, las pocas veces que he tenido un rato como para ir al cine (tengo una peque de 1 año) no lo hago por dos razones:
1 - Las películas que pasan suelen ser bastante pedorras.
2 - Cuando hay una medianamente aceptable no viene en su idioma original.

Pienso que no solo se pierde en cuanto a la interpretación del actor, se pierde muchísimo en el sonido. Es verdad que se puede alegar que si leés no ves, yo que se, eso es tema de cada uno. No me imagino viendo (aunque lo hice una vez porque el streaming que conseguí estaba así) Game of Thrones en español.

Ojo, a MacGyver me lo como doblado.

Pancho dijo...

Y.........ver una película doblada es como ver un remedo de la original, las voces no son las de los actores y ves que los labios dicen otra cosa que lo que estás escuchando, horrible. Por supuesto que prefiero los idiomas originales, recuerdo cuando en Cinemateca nos fumábamos películas de Azerbaiyán por ejemplo, con subtitulos en rumano y con la traducción al español en off por Martinez Carril que iba leyendo sin acentuacion alguna, tipo: "ooooooooh bésame aquí hasta que me muera."

Max dijo...

Creo que no hay nada mejor que el idioma original de la película o serie. Por un tema de costumbre uno acepta doblajes de series que vio en su momento en la televisión cuando no existía el cable y que "suenan" raro en su idioma original. Ej: Los 3 Chiflados, El super Agente 86, Los Simpsons, Alf (Schnyder).
Tengo entendido que en España por ley todas las películas deben doblarse por actores Españoles. Eso si por ejemplo hay uno que dobla a Robert DeNiro por ejemplo y lo dobla en TODAS sus películas.
Es cierto lo que dice ALF, el de Colonia Valdense, no el de Melmak, que el centrarse en leer el subtitulo hace que perdamos parte del panorama de la pantalla y se escapen cosas. Que se yo.. igual si o si prefiero los subtitulo, incluso en películas Gallegas o Mexicanas donde a veces no se entiende un carajo.

Unknown dijo...

Vaya entonces nuestro recuerdo y cariño para Eduardo D´Angelo, "El hombre del doblaje" y sus mil voces

Alvaro Fagalde dijo...

El problema del doblaje es que se deforma una parte de la película (la banda sonora) lo que no es menor porque se sustituye un trabajo generalmente muy calculado (los diálogos originales) por un trabajo hecho a todo lo que da por gente que no es actor/actriz sino que sabe más o menos hacer coincidir un texto con el movimiento de los labios.

En muchos países -incluso Argentina- se ha defendido el doblaje por el alto porcentaje de analfabetos que quedarían afuera en una película con subtítulos.

Se me dirá que insertar una o dos lìneas con palabras abajo en la imagen también es intervenir en la película, pero siempre se considera el mal menor. Más teniendo en cuenta que los doblajes no siempre respetan el texto original. Aunque los subtítulos tampoco, especialmente porque se calcula que la gente sòlo puede leer el 80 % de las cosas que se dicen y no se puede ponerlo todo.

También podemos agregar que, como en casi todas las cosas de la vida- hay pésimos doblajes y pésimos subtitulados.

Ultimamente lo que se está viendo -más en el cable que en el cine- películas dobladas donde hay una enorme diferencia de volumen entre el diálogo (doblado) y los otros dos componentes de la banda sonora (ruidos y música) que, por cierto, se envían separados de los diálogos originales de forma que se les pueda agregar el doblaje. Pero por problemas supongo que de micrófono, muchas veces el diálogo doblado se escucha mucho más bajo que el resto de los sonidos.

Alvaro Fagalde dijo...

En fin, todo muy complicado. Yo voto en contra del doblaje.

Alvaro Fagalde dijo...

Eso sí, contando whatsapp, Fb y toda la majuga se leerá más que antes pero se lee mucha menos literatura que antes.

Alvaro Fagalde dijo...

Ilich dice que no puede tragar las dobladas. Mmmmmmmmmmmmmmm.

Max dijo...

O sea Faga querido, la mejor opción es aprender Inglés, si consumimos cosas en ese Idioma, o Frances, Aleman, etc.


cavernícola dijo...

Cuando no había cable ni Netflix ni internet y teníamos que morir viendo Sábados de Cine y Casino Montecarlo nadie se quejaba de los doblajes, qué placer escuchar hablar con la misma voz a Clint Eastwood, Charles Bronson y Liz Taylor.

Alvaro Fagalde dijo...

En realidad si, Max. Pero claro que es mucho pedir.

Tambien lo ideal es aprender idiomas para leer a los libros en su idioma original pero uno sigue leyendo traducciones.