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| El claro penal que el árbitro ignoró. |
NACIONAL 0:1 BOTAFOGO
Cancha: Gran Parque Central (aguantó muiy bien la lluvia y los piques de Kevin). Público: 20.000 personas.
BOTAFOGO:
Roberto Fernández: en su camiseta dice “Gatito”, lo cual es una ventaja para él, dada la proverbial tendencia del futbolista uruguayo a sucumbir ante los felinos (4).
Arnaldo André: no está de acuerdo con las últimas tendencias sobre violencia de género (3).
Joel: se enoja cuando se rompe la antena (3).
Emerson Silva: expeditivo (1).
Víctor Luis: no sabe lo que es el Lava Jato (3).
Rodrigo Lindoso: lindoso garoto (3).
Bruno Silva: desafectado en su momento por Tabárez (2).
Matheus Fernandes: su hermano se llama Klinsmann Fernandes (1).
Joao Paulo: debutó con un pibe. Anotó el único tanto del partido (5).
(79′ Camilo): batalló (0).
Roger: inquietó (1).
(90′ Marcos Vinícius): incidió más que Kevin Ramírez (1).
Rodrigo Pimpao: piensa que el standup no es un género digno (2).
(83′ Guilherme): pocos minutos en cancha (4).
Director técnico:
Jair Ventura: fruto de una relación extramatrimonial del panelista de Intrusos con el ex Peñarol, en su momento tuvo que vender el Toyota Célica del padre para poder subsistir (3).
NACIONAL:
Esteban Conde: una pelota al arco, un gol. Huelgan los comentarios. En el resto, gran partido, transmitió seguridad (3).
Jorge Fucile: inquietó a propios y extraños. Fundamentalmente a los propios (1).
(56′ Kevin Ramírez): hizo valorar el aporte de Fucile. Si no tiene ganas de jugar, no juegue, mijo (-2).
Rafael García: la gente lo mira y se pregunta cosas tales como “¿te acordás de Ribar Rodríguez?” (0,5).
Diego Polenta: excelente partido. La caminata enloquecida rumbo al túnel mientras insultaba al árbitro sin mirarlo entra en los manuales del humo futbolístico. Bien, capitán, bien. (7).
Alfonso Espino: cuando Espino se convierte en una de las principales armas ofensivas del equipo, algo no anda bien (4).
Santiago Romero: colorado vota colorado (3).
Alvaro González: por suerte tiene pinta como para enganchar en el mundo del modelaje o de los medios cuando opte por el retiro (1).
Felipe Carballo: erró un penal en la Bombonera (2).
Tabaré Viudez: si jugara todos los partidos como jugó los primeros 30 minutos del partido, sería el mejor jugador del universo. Pero no, luego retomó el nivel lagunero (5).
(82′ Martín Ligüera): no hizo nada, pero ¡qué placer oírlo declarar! (1).
Sebastián Fernández: ha incorporado diversos gestos a su repertorio, de estar siempre feliz ahora también puede estar enojado y socarrón. Bien, es por ahí (3).
Hugo Silveira: maneja los fundamentos del delantero centro a la perfección, solo le falta el ítem “introducir el balón en el arco”. De acá a diez años será un delantero completo. Mientras tanto, no justifica titularidad (1).
(72′ Diego Coelho): su padre era chueco (1).
Director técnico:
Martín Lasarte: una vez que su equipo juega bien, no es capaz de hacer un gol. Como para que no le reclamen la próxima vez que gane jugando de manera horrorosa. (3).
GOL: 37′ Joao Paulo (B). Un gol de morondanga, puntualmente.
Juez:
Julio Bascuñán: le metió la mano en el bolsillo a Nacional y, por extensión, a todos los uruguayos. Pasó Gustavo Méndez y dijo que él, en un partido Rocha-Nacional, lo cobraba. A favor de Nacional, pero lo cobraba. Encima, pudo haber expulsado a Fucile y García, y no lo hizo. Flechó la cancha (1).
Lubo Adusto Freire.
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