Salada la canchita: Carta documento

Hace unos días me llegó por interno una comunicación del Señor Director donde compartía una aclaración formulada por el conocido cineasta Pablo Stoll, que se refería a una Canchita de hace bastante tiempo atrás. En ella el conocido pelirrojo (o algo así) aclaraba amablemente que no era cierta la información que había publicado hace mucho alguien que en realidad, era un servidor, sobre las intenciones de la película "Whisky", codirigida por él, de participar en el premio Oscar a mejor película del año.


En realidad, el error fue mínimo y puede ser consecuencia de recordar mal algo o de haber sido mal informado. La diferencia en cuestión era que yo decía que se habían presentado con todas las formalidades a la carrera por el premio principal y la realidad es que pensaron hacerlo y desistieron finalmente. 

El artista

Lo peor era que en el párrafo correspondiente pasó algo que uno tiene que cuidar si quiere escribir bien y tiene -lo que no es habitual- tiempo suficiente como para pensar tranquilamente lo que hace y corregirlo minuciosamente después: una frase quería decir una cosa pero, como estaba escrita más o menos, se podía interpretar de otra manera que no era la que quería su autor. O sea, yo.

Concretamente, al decir que los productores de "Whisky" habían intentado inscribir al film como postulable a mejor película estrenada en Estados Unidos en el año, agregaba que no era "una joda mía" sino que era en serio. Leída así, parece que me burlo de que unos uruguayos creyeran que un largometraje nuestro pueda ser mejor que los de Hollywood y no quise decir eso.

Sin lugar para los débiles

La película dirigida por Stoll y el finado Rebella me sigue pareciendo la mejor (de ficción) realizada en toda la historia de nuestro cine, del que he visto no digo todo pero sí todo lo que puede valer la pena ver. Y varios de los que no. El problema es que nunca "Whisky" podría ser considerada mejor del año para la gente que vota y que trabaja en la misma industria donde se realizan films como "Los vengadores" y todas sus continuaciones, los X Men, los Star Wars y todos esos.

Se me dirá que han ganado películas que nada tienen que ver con frívolas adaptaciones de historietas y la lista puede aquí ser muy larga. Desde la última "En primera plana", pasando por "Birdman"; "El artista"; "¿Quién quiere ser millonario"; "Vidas cruzadas"; "Belleza americana"; "El silencio de los inocentes" y "Dos extraños amantes", por no irnos más lejos. Sí, pero es que en realidad no se suele premiar al exitoso tanque de acción sino a la obra más "madura", "importante" o "grande", sin dejar ni por un momento de ser la típica película exitosa de la industria. La audacia les llega hasta "Birdman", con Michael Keaton, Edward Norton y Emma Stone pero no hasta "Whisky", con Jorge Bolani y Mirella Pascual.

Los infiltrados

El error es creer que la película que gane esa tómbola llamada votación de 7000 miembros de la Academia -mejor dicho, de productores y trabajadores de la industria norteamericana- es efectivamente, la mejor del año. Los tipos laburan ahí y para ellos lo más importante es si una producción tuvo éxito o no, si les aportó prestigio -o sea, posibilidades de seguir siendo contratados- y poco les importa un buen film si no consiguió convencer a las audiencias. Todos estamos en condiciones de hacer una larga lista de películas malas que hicieron mucho dinero y de otras, mucho mejores, que no hicieron millonario a nadie. Si alguna es un poco menos infantil y le va más o menos bien, puede ganar el Oscar del año. 

Ahora, creer que un muy buen film de un país tan poco junado como el nuestro, minimalista, hablado en castellano -los yanquis odian como la peste leer subtítulos- con actores desconocidos y donde "no pasa nada", podía ganar el premio principal era una locura. Tenían que gastar mucha plata e hicieron bien en no gastarla. Ese año, si las cuentas no me fallan, fue el que ganó "Million dollar baby" (de lo peor del viejo Eastwood) y estaban nominadas "Ray" y "El aviador", mucho más potables para el gusto de quienes votan. También figuraba la excelente "Entre copas", compitiendo sin muchas posibilidades, seguramente por las mismas razones que tenía el film de Rebella & Stoll.   

Alas, la primera ganadora

Pablo: me gustan tus columnas de los miércoles en "Suena tremendo" y pido perdón por no haber visto tus películas en solitario. Algún día capaz que podríamos conocernos personalmente y tomarnos varios escoceses -atenti a la sutileza- para conversar de ese tema en común que nos apasiona y de cualquier otro. Perdón por el pequeño error, no le echés la culpa a Reyes que de cine no sabe un pomo.

Salada la canchita, una columna que no fue nominada a mejor espacio de crítica de cine simplemente porque es una cagada, hoy te presenta un simpático video que muestra todos los ganadores a mejor película desde la primera entrega hasta la de hace cinco años atrás. 

Si son discutibles las votaciones, los rankings lo son multiplicados diez veces. Este tiene un criterio muy discutible como todos, pero trae información interesante y, en algunos casos, compartible, sobre películas que no ganaron el Oscar y las que sí.