domingo, 7 de agosto de 2011

CUENTO: "Z" y "K" (lo que nadie se atrevió a contar, eso es lo que no encontrará en el cuento)


"Z" y "K"


Mucha gente cree que por ser cómica, graciosa o payasesca no debe involucrarse con gente seria. Esta conducta está errada ya que ayudan indirectamente a aumentar ese abismo que los separa. Los pocos serios (de nacimiento) que llegan a pasar por payasos no resultan ser tan cómicos como los demás, pero pasan por el montón, pocos de estos han llegados a ser destacados. En la vida cotidiana:

En la oficina. Un empleado (Sr. K) y su jefe (Sr. Z). El Sr. Z es una persona de negocios que parece que le hubiesen hecho una cirugía para no sonreír (es serio). K hace que la oficina entera se retuerza de risa solo moviendo un dedo. Z y K se cruzan: Z saluda mientras K. le levanta graciosamente su dedo mayor, Z bufa consiguiendo que K. diga: “¿Me está refunfuñando a mí?”

Z- No, a su abuela. Dígame, no le parece suficiente los 900 pesos que le pago por mes que me anda tomando el pelo.- en los labios de K. se presagia un escrupuloso: “¿Qué pelo? Usted es calvo.”


Z- Le recuerdo que le tenía prometido un aumento. Pero…

K- ¿Un Aumento?- dice pensando en una solución a sus problemas económicos, cambiando su tono irónico a un tono de interés o negociación.

Z- Cierto, se lo dije al portero González. ¡Gonzáles!, le voy a dar ese aumento que le prometí: hoy ya cobra 5000.

K- Señor Z,- dice con tono de desesperación- yo solo gano 900, va, “gano” es un decir.

Z- Ya sé. ¿Qué se piensa? ¿Que no sé cuanto le pago a mis empleados?

K- Tengo diez hijos… perdón once, cierto que hicimos el control de ADN y al final Pablito era hijo mío y no del negro con el que me engaña mi esposa.

Z- ¿Enserio tiene once hijos? Mire, si puede criar a once supongo que podrá criar a doce. Es que Daniela, mi secretaria, quedó embarazada y no quiero que mi esposa se entere, para evitar lío, ¿vio? Aparte ella, pobre, con los tres hijos que ya tiene (no sabe de donde salieron) no pude encargarse de otro más. Bastante ya que vive sola y se tiene que arreglar con los 900 pesos con 50 centésimos que le pago.-K pone cara de miserable-¿Por qué pone esa cara K ? ¿Le parece mucho? Mire que los 50 centésimos son una cosa mía, es para que venga comiendo chicle, así tiene buen aliento y no ese aliento a esas cebollas podridas que se roba del almacén. El tema es: ¿Me lo cría al pibe o no?

K- ¿Usted cree que yo soy idiota?

Z- No, nunca. Justamente, si se arregla con 900 pesos para 11 gurises, su esposa y usted, debe ser alguien muy inteligente, la debe patinar bien la guita. ¿Cómo hace?

K- No me tome el pelo- dice sosteniendo el cuchillo que siempre lleva en la media por las dudas.

Z- No le estoy tomando el pelo, y baje eso por favor, que le va a sacar un ojo a alguien.

K- A vos te voy a sacar un ojo, tarado.

Z- Perdone no le entendí lo que dijo. Es que como solo tiene tres dientes no vocaliza bien. Le tendría que haberle dicho a los patovicas que le mandé que no le rompieran los dientes, bue… que va ser…

K- ¡AH! ¡Fue usted!

Z- Si, lo que pasa es que un primo mío que anda en esas me dio un vale por una patoteada gratuita, y como no tenía a quien mandársela se la mandé a usted. No sé, se me ocurrió nomás. Capaz que le parecía gracioso.

K- ¿Gracioso? ¿Gracioso?¿Que vengan tres monos de dos metros, te muelan a palos y te metan en un tacho de basura?

Z- Puede ser, depende de las circunstancias, de la situación, del contexto.

K- No se haga el que habla bien, con palabras complicadas y todo eso que yo sé bien que no terminó la secundaria.

Z- No se haga el vivo que usted ni terminó la primaria.

K- Y la zorra esa de tu secretaria no terminó ni la jardinera, no sé siquiera si entró.


Z- No la meta a ella en esto. Y no hablemos de su esposa.

K- ¿Qué pasa con mi esposa?

Z- Nada, por eso le digo que no hablemos de ella. BUENO, basta de charla y póngase a trabajar para cambiar el mamarracho ese de artículo que hizo.

K- Si señor- dice guardándose el cuchillo devuelta en la media.

K. va a su oficina y se sienta. Pensando lo que piensa todos los miércoles a la misma hora después de cruzarse con el jefe y provocar una discusión: “Algún día voy a encontrar la manera de vengarme por lo que le hizo a mi perro”.

9 comentarios:

Macarena dijo...

Che, desde las 17 hs y ningún comentario?

¡Vamo arriba!

Apoyen al artista nacional!!!

elCofre dijo...

desde las 17hs y dos comentarios.
uno mío.
y otro diciendo que no hay comentarios.
bueno.

Alvaro Fagalde dijo...

El mejor cuento de Gjoffe en mucho tiempo, lo que en realidad no es mucho decir.

pipicui dijo...

Gjoffecito, sos un incomprendido, loco.

Fede Wainstein Diana dijo...

creo que ya lo conocia

El editor dijo...

Yo para mi que estamos en un lugar que o damos para adelante o no damos. Ustedes ven.

Anónimo dijo...

Totalmente inesperado que volviera a ponerse el cuchillo en la media...

elCofre dijo...

Fagalde, gracias por la agresión gratuita.
La próxima seguro que te la pago.

SofíaBD dijo...

mantengo la opinión de que el mejor cuento ha sido el de alberto y carlos y la memorable acotación "mi vida me la debo haber dejado en casa"