Fue primicia

La batalla de Ponte Sampaio

¿Ven esa casa amarilla casi al centro de la imagen, un poco hacia la izquierda? La de mi padre es la de al lado.

Ponte Sampaio es una parroquia del ayuntamiento de Pontevedra, Galicia, España. Supo ser un municipio independiente pero en los años 1950 se integró a Pontevedra, tras un procedimiento poco cristalino (parece que un concejal hizo firmar unos papeles y vendió la independencia administrativa por unos mangos). 

Toma su nombre del puente que la une a la parroquia de Arcade y donde fue librada una batalla, conocida como Batalla de Ponte Sampaio, decisiva en la Guerra de la Independencia Española contra los franceses. Una batalla muy desigual entre un ejército profesional francés y unos cuantos gallegos y gallegas armados con palos, piedras y hoces, ayudados por algunos soldados españoles e ingleses. Y de esa batalla vamos a hablar hoy.

Nos situamos en 1809. Los franceses, en plena era napoleónica, habían decidido invadir la península ibérica. España se resiste con un ejército mucho menos preparado. ¿A España quién lo apoya? El ejército inglés, que había entrado desde Portugal, pero que en ese momento, mediados de 1809, se empezó a retirar rumbo a La Coruña porque los franceses estaban pillos, estaban invadiendo desnudos. Y como era de esperarse, la comunicación entre españoles e ingleses no era muy fluida.

¿En qué estaba el imperio napoleónico en ese momento? Veamos una rápida cronología a modo de resumen: 1789, revolución francesa. 1799, Napoleón mete golpe militar y toma el poder. En 1802, Napoleón, que medía 1,69 y tenía 33 años, firma la paz con Inglaterra y se gana al francés de a pie que quería más seguridad.

En 1804 hay plebiscito para nombrarlo Emperador de los Franceses, gana el sí y empieza a construir su leyenda.

Napoleón era célebre por guardar la billetera en la panza. Acá se lo ve buscando cambio para el boleto.

Y como todo buen emperador, Napoleón salió a formar su imperio. Mal no le fue: llegó a conquistar la mayor parte de Europa, incluyendo España, Italia y Alemania (imaginen todas las Copas del Mundo que llegó a tener).

Hasta que se cebó y quiso imponer un bloqueo a Inglaterra, que es el clásico rival de Francia. Rusia saltó por Inglaterra y Napoleón invadió Rusia, donde comió del tupper, como bien sabemos. Tras varias idas y vueltas, en 1815 pierde en Waterloo, Bélgica, y ahí abdica y lo mandan una isla de mierda donde muere 4 años más tarde.

No es casual que acá en Sudamérica hayamos empezado el proceso independentista más o menos en esa época, ya que la españolada tenía otras prioridades (básicamente, entender a los ingleses y sacarse de encima a los franchute).

El finado John Moore.

DE GALICIA A KAMCHATKA

Pero estamos todavía en 1809. El 16 de enero de ese año, batalla en La Coruña, denominada batalla de Elviña (esas bolas no son de niña). Las fuerzas inglesas al mando del General Sir John Moore, con 14 mil hombres, provoca muchas pérdidas en los franceses, pero se repliega. Incluso el pobre Moore pide pase para los quietos (léase: muere, espicha, sings flower). Pese a la pérdida de su líder, se habló de una victoria moral de los ingleses.

El 17 de enero, un día después, las tropas francesas ocupan Santiago de Compostela, el 26 de enero entran en Pontevedra y el 31 de enero llegan a Vigo.

En 15 días, toda Galicia estaba en manos francesas.

El propio Coutts, escocés amigo de España.

Sin embargo, los gallegos se ve que ganas de ser franceses no tenían, así que empezaron a rebelarse a lo largo de todo el territorio, a partir de lo que se llamó alarmas: grupos de vecinos armados con lo que tenían a mano que le hinchaban las pelotas a Napoleón. A fines de marzo, estos grupos de vecinos organizados junto a tropas regulares al mando del coronel Pablo Morillo, y en conjunto con la fuerza de un capitán al que apodaban Cachamuiña, consiguen liberar buena parte de Galicia, incluida Vigo, con apoyo de los capitanes escoceses George McKinley y Coutts Crawford, el hermano de la Cindy.

Ahí los franceses reaccionan y salen a recuperar lo que creían suyo, porque los imperios tienen eso: les gusta perpetuarse lo más posible.

Michel Ney murió fusilado, desde los 11 pasos.

En ese momento, el Mariscal francés Michel Ney (apodado el Valiente de los Valientes, recordado por su campaña “Hey, votalo a Ney”) decidió salir a recuperar Galicia con un ejército de casi 10 mil hombres (8 mil soldados, 1.200 jinetes y 13 cañones) que salió desde Lugo. La idea era llegar a Pontevedra, prenderla fuego, y seguir hacia el sur. Tranqui. Pero dice la leyenda que Ney, que en el fondo era un romántico, vio tanto verde y exclamó: “Ah, Pontevedra, tu belleza me desarma”. Flojito.

¿Y dónde se produjo el encuentro de los franceses con ese ejército español liderado por Morillo, mitad soldados mitad vecinos? Precisamente en Ponte Sampaio.

SE ARMÓ

Los españoles destruyeron cuatro arcos del puente de diseño romano que da nombre al pueblo y se atrincheraron a la espera de los franceses que venían desde el pueblo de enfrente, Arcade. ¿Saben cómo se llama el río que separa a ambos pueblos? El terror de los relatores, el Río Verdugo.

Ney manda 35 soldados a investigar el puente y zas, los matan a todos.

Así que al día siguiente, el 7 de junio de 1809, Ney llega con todo su ejército y se instala del otro lado del río, y se empiezan a dar con toda la artillería, de un lado y del otro, con lanchas cañoneras que también disparaban de lo lindo.

La batalla siguió durante todo el día, hasta que el día siguiente, el 8 de junio, Ney decidió dos cosas: mandó un destacamento de 1.500 hombres río arriba, para intentar cruzar por un puente que estaba sano y sorprender a los españoles. Y lo otro que decidió fue esperar a que el río bajara para cruzar a pie y dársela bien dada a los españoles.

El propio Morillo. Que parece que casi llega a Uruguay.

Cosa que hicieron: buscaron el lugar más llanito e intentaron cruzar, pero los españoles repelieron el ataque, entre otras cosas, con lo que se llamó cañones de palo, cañones hechos de madera de roble que no tenían mucha duración, pero que disparaban de lo lindo. Así que no pudieron cruzar.

Entre las embarcaciones que ayudaron a combatir a los franceses destacaron la lancha cañonera “Cadmus”, el bergantín español “El Tigre” y el mejor de todos: el bergantín portugués “El Curioso”. ¡Qué bergantín!

Encima al rato le cae un Whatsapp a Ney, que le avisa que los 1.500 hombres que había mandado río arriba, no lo habían logrado, porque los gallegos no eran giles tal como se piensa a partir de los chistes: la vieron venir como la de Amado al Frente, pusieron unos fusileros ahí del otro lado del puente y fueron bajando francesitos de a uno.

Así que Ney, que por ahí no era un gran militar pero sabía aceptar una derrota, viendo que no llegaban los refuerzos comandados por un tal Mariscal Soult que decidió quedarse tranqui en Lugo, al día siguiente, el 9 de junio de 1809, emprendió la retirada. Un mes después, ya no quedaban franceses en Galicia. Hoy, si vas, no encontrás uno ni de casualidad.

DATOS CURIOSOS

Ponte Sampaio forma parte del camino portugués de peregrinación a Santiago y también integró la Vía Romana XIX que unía Braga con Lugo. Por eso, su puente está contantemente cruzado por turistas con bastones.

A ambas márgenes del río Verdugo hay placas conmemorativas de la batalla. También se cuentan historias de vecinas del pueblo que, armadas con hoces, aguantaban abajo del puente y cuando un francés caía, le cortaban el cogote, al mejor estilo Juego de Tronos. Las nuestras tiraban aceite hirviendo, las de allá eran un poco más directas.

En 2009 hubo una gran fiesta para festejar el bicentenario de la batalla, con recreación del combate, soldados, cañones, todo. Curiosamente, dos días antes del evento, un vehículo de la empresa encargada de llevar adelante la ceremonia, chocó contra un costado del puente, que es muy angosto (si pasa un vehículo, tenés que ponerte contra la baranda para que pueda pasar) y destrozó 10 metros de baranda. Como para darle más credibilidad a la recreación, pues, como vimos, los españoles habían destrozado el puente previo al choque con los franceses.

Carminha Piñeyro en plena acción, ajusticiando a un francés cualquiera.

Como dato curioso, parece que la zona de Ponte Sampaio es común que haya perros llamados Ney.

Estatua de Ney, el perro, en Lugo. Parece que era muy querido en la plaza, todos venían a jugar con él. Hasta que murió.

El mes pasado, mientras recorría la casa de una amiga de mi padre que jugaba con él hace más de 60 años a orillas del Verdugo, encontré un texto que recordaba a Morillo y a todos los héroes de aquella batalla y que terminaba así:

Sigamos las huellas de los sembradores, y si llega la hora en que la Patria en peligro, amancillada por el pie del extranjero, llame a nuestras puertas,

una sea la voz que al grito de la sangre responda y repitan los ecos:

¡TODO POR LA MADRE! ¡TODO POR ESPAÑA!

Le sugiero leer este texto mientras suena la marcha real. ¡Te garanto que se te cruza Piqué y lo querés cagar a piñas! #CatalunyaNoEsEspaña 

Y para recordar a todos esos campesinos y campesinas que se plantaron como un árbol firme junto al río, canta Joan Báez, en homenaje a todos los que tenemos aunque sea una gota de sangre gallega corriéndonos por las venas.

Vuelve La Casa de Papel: 10 predicciones

Y obvio, no vamos a decir nada. Pero nada. Porque las redes están llenas de bobitos que la van de vivos y al fSE MUERE EL PROFESOR

Veamos algunas predicciones, ahora, con porcentaje de cumplimiento:

Toy Story 4: aprender a soltar

¿Está buena o no está buena? Porque de eso se trata la vida, ¿no? Realizar juicios drásticos sobre todo lo que se nos pasa por delante.

Toy Story 4 tiene cosas buenas y malas. Entre las buenas:

COSAS BUENAS DE TOY STORY 4

- Están los personajes clásicos.

- Hay, como suele ocurrir, algunos personajes secundarios que aportan momentos hilarantes.

- La película no es muy larga, se hace llevadera.

- Invita a que los botijas creen sus propios juguetes y los valoren más allá de su precio, porque lo que es basura para vos, puede ser mi mejor amigo. Consumista del orto, a vos te hablo.

COSAS MALAS DE TOY STORY 4

- En el 95% de la película no hay de qué reírse.

- El personaje de Forky es medio poronga, incluso Disney tuvo que sacar unos muñecos del mercado porque los guachos se atragantaban.

- El personaje del juguete maloso con un pasado oscuro que gobierna el antro al que van a parar los juguetes y que tiene un equipo de secuaces que le es funcional, como que ya se había agotado con el oso rosado sorete de la entrega anterior.

- Hay ciertos detalles que le quitan credibilidad al relato. Por ejemplo, en determinado momento, necesitan entrar a una vitrina, para lo cual, los protagonistas buscan denodadamente una llave. Curiosamente, la misma vitrina es abierta sin llave alguna por "los malvados" más de una vez.

- Parece que había una escena de alto voltaje erótico que fue removida. ¿Los juguetes no pueden garchar, acaso?

¿Cogen los juguetes?

Para mi gusto, el balance es positivo, aun cuando estemos -posiblemente- ante la entrega más floja de la saga. ¿Por qué? Por el final.

Que no diremos cuál es porqSE MUERE BUZZ. El siempre presente mensaje de las películas de Disney, Pixar es claro: hay que aprender a soltar y a tomar decisiones que, muchas veces, se apartan de lo que el mundo espera de nosotros.

Porque convengamos que el final no es el esperado. Mucha gente lloró cuando vio lo que terminó pasando, otros quedaron indignados, etc. Pero lo cierto que Woody hizo lo que tenía que hacer.

En un mundo donde muchos obran de manera egoísta, estando pendientes de agradar al otro y/o del quedirán, primero se la jugó por sus ideales o después supo soltar y resignar al mismo tiempo. La vida nos lleva a tomar las decisiones, y generalmente cuando una decisión se toma, hay otra que se deja de tomar. Es imposible dejar a todo el mundo feliz, y Woody -finalmente- lo entendió mejor que nadie.

"Cambio dolor por libertad", cantaba Natalia. Y vaya si tenía razón la -casi- candidata a vice.

En cualquier caso dejamos planteada una duda. Capaz que si no viste la película, no te conviene leerlo. O no, qué sé yo:

Stranger Things Temporada 3: la polémica

El jueves 4 de julio, en conmemoración de un nuevo aniversario de la independencia de nuestra madre patria, se estrenó la 3ª temporada de Stranger Things. 8 capítulos de 50 minutos donde se instala una temática similar y relacionada con la de las dos primeras temporadas, pero diferente.

A continuación, compartiremos algunas reflexiones sobre la temporada que la mayor parte de los fanáticos de la serie ya habrán visto, aunque sea en parte.

No haremos spoilers, puede leer tranqSE MUERE ELEVEN