El clásico en imágenes (parte 1)

Estalla la parcialidad tricolor, que esta vez tuvo buenas excusas para ser minoritaria. ¿750 pei la América? ¡Asesinos!

Algún día los hinchas carboneros se darán cuenta de que los globos negros no se ven, y gastarán ese dinero en cosas más útiles, tales como bombas de estruendo, banderas o pasta base.

La nota triste: cuatro inadaptados individualizados con los colores peñarolenses atraviesan la Platea América con vistas a provocar a la parcialidad tricolor.

Otro sentido homenaje de la falange alba a su ídolo, el francés Juan Andrés Larre, en un nuevo aniversario de la Toma de la Bastilla.

Posa el primer equipo tricolor, junto al equipier japonés que tantas satisfacciones le ha dado a la hinchada.

El Gran Gustaf hizo lo que pudo. Al menos su actuación sirvió para atenuar la cantidad de veces en las que uno y otro amenazaron con matar nuevos hinchas rivales.

Después nos preguntamos por qué a Peñarol le va como le va. No nos imaginamos al Peñarol de Bagnulo salir al campo con mascotitas que en lugar de la rayada, llevaran divisas emparentadas con Kity y Minnie.

El asistente le explica a Medina que ya está viejo pasa usar pelo largo y vinchita.

Mora anota el gol de apertura. El portero Bava pierde los estribos y amenaza al banco carbonero: "háganse los vivos que después entra el Chino (gesto) y los clava". Otra versión indica que estaba ensayando la coreografía de "Loco, loco" de la malograda banda "Mayonesa".

Lo poco que va quedando de los noventa, además de Darío Rodríguez y Zalayeta: la siempre vistosa coreo de los Pibes del Palacio. ¡Viva el fútbol!

Las cosas no andan de la mejor forma en el boliche "Botineras", por lo que su dueño -el popular Chengue- le pidió una ayudita laboral al Paco, que siempre está dispuesto a asistir a un amigo en la mala.

Porta la peina y se despeina, en la jugada que derivó en el segundo empate tricolor.

Otrora malogrado futbolista con intenciones de abandonar el equipo albo, hoy el propio Píriz (gran cogedor) es un bastión del mediocampo. Note cómo el hincha de Peñarol arriba a la derecha finge desinterés.

Un invitado de lujo en el Centenario: el cantautor internacional Bon Jovi.

"Cuando tengas mi edad te podrás hacer mis mechitas, por ahora arreglate con tu peinado flogger, pedazo de un puto" comentó Damonte, lo que pudimos saber gracias al trabajo de los lectores de labios, el gremio más alcahuete del mundo.

"Sacá ese bolso de mierda de ahí, pelao" comentó Darío, tras recibir un beso esquimal.

Molesto por no haber sido tenido en cuenta por el Profesor, Martín Rodríguez se hace un tiempito para relatar el partido para Radio Uruguay.

En gran gesto, el longevo Scotti le avisa al juvenil Gelpi dónde irá la pelota. "Te la pone allá abajo, pendejo".

Lo mejor que hizo el propio Valdez, amén de facilitar el tiro libre decisivo del equipo de sus amores.

"¿Cuántos dedos ves, Cangu?" le decía el médico. "No veo ninguno" respondía Porta. "Pero abrí los ojos, pajero" replicaba el Galeno. A lo que el ariete tricolor volvió al campo de juego, amenazando con emular a su casi tocayo Abdón.

Termina el partido y el árbitro se une al festejo de los futbolistas tricolores. No en vano fue la figura del encuentro, según el propio Polilla, gran perdedor ante el elenco de la guaraniza.

Festeja Nacional entre los agentes del orden. ¿Álvarez de lejos no da Eguren? Habría que verlo en slip para cotejar.

Quince minutos después alguien le avisa a Porta que Nacional ganó, y ahí el hombre estalla de la emoción

Mientras todos festejan con el ídolo Recoba, un veterano canoso aprovecha la volada para manosear a un alcanzapelotas. "Alcanzame éstas", le susurró al oído. Penoso.

Termina el partido y la estrella tricolor Ignacio La Luz junta sus petates. Otra fiesta clasica ha llegado a su fin.