¿Fuiste a ver a tu vieja?

Día de la Madre, casi sin fútbol. No había excusas para no visitar a la susodicha progenitora, que romperá los huevos como ella sola, pero es la que nos parió. Un saludo a esa máquina de hablar pelotudeces que es la mía y un recuerdo -que no puedo evitar- para tantas veces que en el sanatorio tuvimos que llamar al vigilante porque los hijos se enfrentaban violentamente a insultos o incluso, a golpes de puño, por repartirse los bienes de su aún agonizante mamirri.

Hubo un solo partido por el Uruguayo este fin de semana -¿o habrá que decir por el estadual Montevideano el año que viene?- donde River le dio la comida al Peñarol que muchos creen (!) ya es campeón de la Santander Libertadores. Desde que asumió Almada -un DT sin grandes pergaminos aunque también hay que decirlo, sin grandes oportunidades- el darsenero ha ganado casi todos sus partidos lo que nos lleva a tres posibilidades: A) anda con el culo barnizado; B) es mucho mejor técnico que Carlos M. Morales, el anterior y C) los jugadores del rojiblanco bombearon a éste último. Usted decide.

En cuanto al manya, así como muchos daban por ya ganado el clásico de los offsides, muchos ya se dan por clasificados contra los pitucos (o pepepatos, por decirlo en chileno) de la Católica, en un insólito ejemplo de triunfalismo sin sentido. Obviamente que Peñarol va por buen camino para clasificar y, en realidad, es el favorito. Pero ganó 2 a 0 acá y tiene que definir de visitante. Si alguien cree que los cruzados trasandinos no pueden ganarle por 2 o 3 goles al cuadro de Aguirre, están chapitas.

P.D.: Le ganó Boca a River otra vez, jujú...

BIEN AHÍ, PELUDO
Esta columna está a muerte con las declaraciones del presidente de Nacional referidas a que le desea éxito a su tradicional rival en cuanto representante uruguayo, ya que ellos mismos ya no están en competición. Dirigentes demagogos y manijeadores ya hay demasiados. Lástima el peinado, nada más...

BLATTER: NO EXISTÍS.
Un candidato qatarí para suceder al memón suizo al frente de la FIFA. Imaginen por quién hincho. Mohamed Bih Hamman: tenés mi celular, ¿no?. Tengo cuenta en el BROU.

PUEDO ESCRIBIR LOS VERSOS MÁS ESTÚPIDOS ESTA NOCHE...
Esta sección será parecida a la de la neurona solitaria pero más enfocada a las gansadas repetidas por la llamada "prensa seria". En esta semana, con mucho atraso quiero referirme a la "mística copera".

Este misterioso concepto fue reflotado más que nada cuando se enfrentaron Peñarol e Independiente en esta Copa y refiere a que supuestamente, equipos como los mencionados que tienen varios títulos en su haber -aunque el argentino no la gana desde 1984 y el carbonero desde 1987- llevarían una ventaja en experiencia, veteranía o algún componente etéreo o intangible por sobre quienes no la ganaron. ¿En qué consiste esa ventaja?. Vaya uno a saber.

Que Independiente, por ejemplo, tenga 7 Libertadores en sus vitrinas me parece perfecto si lo usan sus hinchas como motivo de orgullo. Ahora, que eso en 2011 les dé una ventaja en la cancha sobre otros equipos poderosos que no tienen tantos títulos... ¿Qué diferencia hace para los Parra, los "Cuqui" Silveira o los Hilario Navarro de hoy lo que pudieron haber ganado tanto tiempo atrás los Santoro, los Bochini y los Pavoni?.

P.A.R.R.G. (Preguntas al Repedo Respondibles Googleando):
El concepto de "partido clásico" es artificial y discutible. Hay un tipo de clásico obvio, que es el del enfrentamiento entre los dos (o tres) equipos más grandes del país: Nacional-Peñarol; Real-Barcelona; Colo Colo, la U y la Católica en todas sus combinaciones. Otro sería el de los más populares (Flamengo-Corinthians; Chivas-América). El tercer tipo, se me hace, es el de los que pertenecen a la misma ciudad, la misma región o el mismo barrio. Acá los ejemplos pueden ser centenares: Manchester United-M. City (ciudad); Borussia Dortmund-Schalke (región) o Rampla-Cerro (barrio).

Es un lindo espectáculo ver a las respectivas hinchadas diferenciadas con sus distintivos y colores típicos para competir en cantos y papel picado (y para poder romperle la cabeza al otro sin temor a equivocarse). Ahora, hay un ejemplo de clásico de dos equipos de la misma ciudad donde ambos tienen la misma camiseta. ¿Cuál es ese partido?. Aclaremos: no sólo un color sino TODOS los colores son los mismos (no serviría un Huracán-Quilmes, por decir algo, donde ambos tienen camiseta blanca pero los vivos son de distinto color) y ambos son equipos grandes en su ciudad (tampoco vale un Totenham-Fulham aunque ambos sean de Londres porque no es sentido como un clásico, en realidad). Son equipos conocidos de una liga muy importante, no hay que entrar en Wiki en la liga de Osetia del Norte.

Así está el mundo, amistá.