Debido a la falta de tiempo y a la ausencia de algo mejor que mostrar, publicamos un excelente corto que sirve además de advertencia a la ciudadanía: nunca, jamás, le abra la puerta a un productor de cine.
(Nota: el corto empieza más o menos a los 20 segundos, no se impacienten ni suban mucho el volumen o se van a quedar sordos cuando arranque).
Yo para mí que perezvila jamas permitiría una cosa así, o miento yo? Es muy divertida la fauna que se puede encontrar en un rodaje, es una síntesis social digna de estudio.
ResponderEliminarSon así... o peores.
ResponderEliminarEse corto en Uruguay hubiera tenido una variante: la dueña de casa exigiendo unos mangos a cambio.
ResponderEliminarEl corto es buenísimo, pero estoy con Andrés: ¿No le tiraron unos euritos a la doña? Aunque más no fuera para los ansiolíticos que seguramente se tuvo que tomar.
ResponderEliminarNo, los de las productoras son garroneros a más no poder. Que agradezca la gallega que no le morfaron el guisolfo.
ResponderEliminarsho no tengo nada que ver !
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