
Ahora, ¿qué mierda hacía usted cuando llovía y no podía salir a jugar a la calle porque su madre la corría al grito de "entrá, Laurita, que después te viene la tos"? ¿Llegó a hacer barquitos de papel? ¿Se ponía las botas Pampero y se metía en todos los charcos que iba encontrando? ¿O se ponía a mirar por la ventana como un vejiga?
Comparta. Hágale sentir a los infantes de hoy que todo tiempo pasado fue, si no mejor, diferente.
Family + Una copia china y berreta de Lego. Jugar a la pelota dentro de la casa era opcional.
ResponderEliminarBarquitos de papel sobre el agua que corría por el cordón de la vereda por la bajada de la calle de casa. Claro, en ese momento no estaba todo el cordón interrumpido por cientos de autos estacionados. Aparte estaban los milicos y se podía salir a la calle tranquilo.
ResponderEliminarJugar al mikado, a largas congas con reenganche,esperar a las 6 menos cuarto de la tarde para ver la señal de ajuste en la tv blanco y negro a valvulas.Meter nariz por la ventana para ver que vecina hacía buñuelos y que otro torta fritas
ResponderEliminarcomo no habia tv nos armabamos unas historias de película con mi hermano,(también colaboraba el hecho de tener casa grande) desde terror a vikingos!! Después mi viejo compró tele y nos arruinó la niñez...
ResponderEliminarYo siempre fui solitario, por iniciativa propia pero más que nada porque mis amigos vivían lejos. Así que me solía poner en la ventana a ver cómo se mojaba la gente, cómo los ómnibus salpicaban a la gente de la parada y ésta replicaba con puteadas, etc.
ResponderEliminarY si la tormenta derivaba en apagón, ahí sí pintaban actividades del tipo de quemar pelos con las velas.
ResponderEliminarquemar pedos con las velas...
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEl día de lluvia se dibujaba-pintaba, se jugaban juegos de mesa, cartas y otras actividades que no hincharan tanto las pelotas como para poner en riesgo lo importante: enchufar el family en la TV grande (siempre y cuando no hubiese tormenta eléctrica). También me gustaba ayudar a mi madre en la máquina de coser, de ahí el putismo.
ResponderEliminarSe dibujaba, o escribía, o algunas cosas leía, barquitos de papel hasta los 11 años, tengo hermanos así que tampoco la pasabamos tan mal, jugabamos con los autitos, aún recuerdo un par de transformes que teníamos, que tiempos aquellos.
ResponderEliminarHoy sin dudas tengo menos que hacer que en aquellos tiempos.
Siempre un paso adelante. Pensaba hacer un "Botijas" con ideas para sobrellevar la lluvia. Cosa que haré, a falta de otra idea mejor...
ResponderEliminarEn verano me dejaban jugar debajo de la lluvia. Punto para mi vieja.
Maca: el público se renueva.
ResponderEliminarDonde sí era un embole la lluvia, para mi gusto, era en la escuela. El patio interior era chico, y con unas baldosas (que aún existen) que inmediatamente adquirían una mugre impactante. Y la auxiliar de limpieza (llamada Isabel) tiraba aserrín en la puerta, que para mi gusto era un remedio peor que la enfermedad.
ResponderEliminarQue me cuentan de esto:
ResponderEliminarhttp://www.cronica.com.ar/diario/2013/09/16/55467-rusia-abren-escuela-para-practicar-sexo-oral.html
Ah, claro, ¿ahora resulta que nadie se masturbaba? ¡Farsantes!
ResponderEliminarEs que hablábamos de cosas que hacíamos cuando llovía. La paja no conoce de estados del tiempo.
ResponderEliminarAsí como generalmente uno recuerda la "primera vez", ¿se recuerda también la primera paja?
ResponderEliminar¿Eh, amigos?
Con un catálogo de Giovanna.
ResponderEliminarAndres, yo, al menos, la recuerdo como si fuera ayer...
ResponderEliminarY ya pasaron más de 14 años...
Vivía en un barrio sin cordones en las veredas, calle de pedregullo y canaletas. La diversión pasaba por salir a pisar charcos, hacer sapitos en el agua y esperar el apagón.
ResponderEliminarYo vivía en un piso 16. Mi mayor diversión de chico obviamente era tirar cosas para abajo.
ResponderEliminarCada objeto que arrojaba se convertía en un arma letal. Asi revoleaba pilas (AA), bolitas, naranjas, cebollas y toda cosa que tuviera a mano. Los dias de lluvia no eran la excepción.
Como olvidar la primera... por dio...
ResponderEliminarhace como 28 años ya... Fue asi de guapo, en la ducha mientras me bañaba, sacudi sacudi y pense.. "si sigo asi algo va a salir"... como me temblaban las patas...
Yo tb la descubrí "por accidente"
ResponderEliminar¿Alguno debutó con eso sabiendo lo que hacía?
Dantesco el tema de conversación te diré..
Demasiados detalles, Max.
ResponderEliminarAprovecho para comentar que el sabado fui a ver a Bruce Springsteen. La cantidad de uruguayos que habia era importante.
ResponderEliminarConte mas de 10 banderas Uruguayas y un amargo con la bandera de Peñarol.
Peñarol está en todos lados!!
ResponderEliminarUruguay es Peñarol miejah...
Confieso que la descripción de Max fue demasiado explícita.
ResponderEliminarCreo que la pregunta no es "¿la primera fue por accidente?" Sino... ¿cuánto tiempo pasó entre la primera y la segunda?
20 minutos
ResponderEliminarSomos tres hermanos y mi viejo madrugaba así que siesta obligada para él y nosotros chito!
ResponderEliminarTonce hacíamos sorteo a ver quién se ponía el piló y la sbotas y a cambiar las patoruzito, las diney o las marvel al kiosko de la Yoli.
Pintar, dibujar, jugar a los soldaditos (siempre que estuvieran los deberes hechos) y hacer el aguante a la tv educativa.
Y ahora se quejan cuando se quedan sin wi-fi...
Yo tengo un record personal de cantidades en 24 hs, pero me lo guardo para mi porque soy tímido <3
ResponderEliminarMaster, cuidado con los records, más en este complicado momento personal que estás atravesando. Mirá que han habido víctimas fatales.
ResponderEliminarChe en serio fui tan explicito? Bue.. pense que no. Igual de la segunda no me acuerdo...
ResponderEliminarNo Carles, ya no me siento con las energías de mis 17 años (cuando batí mi record) soy precavido hoy día, un tipo culto e inteligente...
ResponderEliminar¿Dos dígitos?
ResponderEliminarPah... te habrá quedado bordeaux.
Muy lindo lo que cuenta Floyd. Yo veía mucho canal 5 mientras jugaba con unos macacos que eran mi juguete favorito, y que un día -misteriosamente- desaparecieron. Así me vi la recordada (por mí) telenovela "Gente como la gente", muchos documentales de Transtel, y el magazine de la tarde con Rosario Castillo cuando era afrodescendiente.
Igual es como que la lluvia da menos ganas de laburar no?
ResponderEliminarDigo porque en teoria la gran mayoria de nosotros esta en el laburo.. y pelotudeando aca en el blog....
o me equivoco?
Max, acá son las 9 de la noche, qué hora es ahí?
ResponderEliminarMax,lo que pasa que somos medios puritanos los uruguayos.
ResponderEliminarCalle de tierra en Paysandú, cordón cuneta recién hecho. Hacíamos represas contra el cordón con la tierra de la calle para embalsar el agua y bañarnos en ella (el concepto desagüe de poso negro no lo manejábamos mucho). Carreras de chancletas en la corriente, barquitos de papel, todo lo que flotara y permitiera jugar carreras. Éstas (*) recorrían un par de cuadras, siguiendo las derivas de la corriente.
ResponderEliminarQué lindo. En las cunetas de Sayago, si intentás hacer eso, lisa y llanamente morís.
ResponderEliminarDiego Floyd: Aca es Sabado de tarde.
ResponderEliminares cierto lo de todos putos,eh,y de chiquitos!!
ResponderEliminarAcá en colonia, lluvia significaba partido en la canchita llena de barro,y pobre del que no fuera.
Camino a la escuela,viejas topper amarillas y caminando por los charcos.
Ya de boludo-pajero-liceal,viejas topper amarillas y a caminar por los charcos (aunque lo de pajero viene de quinto de escuela,tenía varicela y estaba aburrido)
Ahora de viejo,mate y tortas fritas (si,una vieja chota,quién se robó mi niñez!?)
No me acuerdo.
ResponderEliminarPerdón por ser tan explícito.
ResponderEliminarRespondiendo a la pregunta 2: A los 12, no sé el por qué del inicio. Corté cuando llegó la cosquillita.
ResponderEliminarBotas topper amarillas es de oligarca bien pero bien puto.
ResponderEliminarBota funsa papá, industria nacional... con los milicos se vivía mejor
Gente, de todas las estupideces que dicen que hacemos, sólo me conecto a Facebook. Nickelodeon la tenés adentro
ResponderEliminarSeguro que el oligarca que usaba las botas pampero amarillas tenia los playmobil originales.
ResponderEliminarMe hacen reir, chicos.
ResponderEliminarMax,todavía se fabrican las topper? mandame un par número 42 que acá no consigo por ningún lado,y la verdad que son insuperables,jamás un resbalón en cubierta ni en los camarotes
ResponderEliminarLas botas de lluvia son de oligarca. Día de lluvia en patas!
ResponderEliminarde oligarca es salir comodin en el auto,yo ando a pata por eso preciso botas,no pretenderas que pase toda la tarde en el laburo y con las patas mojadas
ResponderEliminarcomo no tengo de lluvia ando con unas Cat que no le entran ni las balas
ResponderEliminarA vos te entran los balas, bufanda!
ResponderEliminarde bufanda uso las gambas de la prima del edin,gil!!!
ResponderEliminarEso no es ningún mérito.
ResponderEliminarPah carrera de barquitos de papel hasta la boca de tormenta!!!
ResponderEliminarEl último va a comprar el gofio, canté!
cómo llueve por éstos lares,che,y justo a mi vieja se le ocurrió venir a tomar mate,mamá esta que chorrea
ResponderEliminarYo tenía unas botas azules compradas en la Argentina en 1982. Cuando me quedaron chicas, pasé a usar las de mi hermana.
ResponderEliminarClaro, era otra la Argentina. Se respiraba otro orden.
y las rosaditas de tu hermana te quedaban preciosas
ResponderEliminarQue grande la familia Reyes venia a la Argentina a buscar Botas. En esa época lamentablemente había botas de sobra.
ResponderEliminarFui una sola vez a la Argentina. Recuerdo unos macaquitos muy simpáticos que me compraron en una tienda Tía. También una araña de goma que me compraron en un quiosco de la estación Retiro.
ResponderEliminarQué aroma particular que tiene el subte de Buenos Aires. En marzo cuando fui con el Nacional del Cacho Blanco, bajé a un subte 31 años después. Y el aroma era inconfundible, es como si nunca me hubiera ido, y los milicos tampoco.
Ya lo dijo Maca en su columna, como el olor no hay.
ResponderEliminarMe imagino Andres que te referis al olor de la estacion cuando esperas, y no al olor que hay adentro en hora pico que apenas te podes subir y hay 50 grados a la sombra.
ResponderEliminarPero es verdad, el olor a subte es muy particular.
Sí, el olor a estación, no al subte. Supongo que es olor al combustible que usan esas máquinas tan electrizantes para mí, acostumbrado a los trenes que pasan por Sayago. El más rápido que tenemos es más lento que Riquelme enyesado.
ResponderEliminar"Pintar, dibujar, jugar a los soldaditos (siempre que estuvieran los deberes hechos) y hacer el aguante a la tv educativa.
ResponderEliminarY ahora se quejan cuando se quedan sin wi-fi..."
Qué grande Diego, es esa, no hay vuelta que darle.
La verdad que no se exactamente a que se debe el olor a subte.
ResponderEliminarSupongo que debe de venir de cuando se calienta el motor o de las bobinas, ya que son electricos. Quizas de la grasa. Es un misterio.
es eso,bs. as. ta lleno de bobinas
ResponderEliminarEl piso de casa era de baldosas y pintaba jugar a la bolita con mi hermano. Otra era jugar a las cartas de la Fórmula 1 y gritar como un desquiciado "cilindros 12" o "velocidad máxima 358". Podía haber fútbol de botones, carreras de autitos o partidos de fobal con muñecos, relatados a lo Kesman por quien suscribe. Que época!
ResponderEliminarLa primera "trepadora" debe haber sido a los 12, pero no me acuerdo tan claramente. Linda actividad que (por contrapartida de las expuestas anteriormente) jamas se abandona.
ResponderEliminarY en el Sayago profundo (no el Sayago burgués de Reyes) el agua podrida pre saneamiento hacía imposible salir a jugar en la calle los días de lluvia. Tenías muchas chances de romperte la crisma gracias a una patinada digna del Fun On Ice.
ResponderEliminarJugaba con la gotera del techo el galpón de mi abuelo.
ResponderEliminarPasaba hoooooras contando la gotas.
Después se preguntan porque asesino gente.
Mi primera vez fue con una revista Caras que había en casa (supongo que era de mi abuela), con fotos de Natalia Oreiro posando en bikini, minutos antes de la inauguración del mundial de Francia 98. Resulta que llovía, valga el recuerdo.
ResponderEliminarDesde ese momento siempre que hablan mal de la Nati yo la defiendo. Porque el primer amor no se olvida.
también podía armarse campeonato de tin-gol en alguna casa,la que sería desalojada con bastante anticipación a la hora de cenar para ventilar adecuadamente (imaginate 7,8 o más adolescentes metidos toda la tarde en una pieza,algun tufito había)
ResponderEliminaren pueblo de herrero cuchillo de palo,Nacho?
ResponderEliminarDe más chico, cuando no conocía la masturbación, si llovía iba a lo de mis amigos de mi barrio. Hay que decir que ya existía el family game, yo jugaba en lo de mis amigos, en mi casa eso estaba vedado, mi vieja era una fundamentalista en contra, ni siquiera me dejaba jugar al Battle City, decía que era un juego que promovía la violencia...
ResponderEliminarDebo ser franco: a pesar de vivir en una ciudad que se enorgullece de ellos, nunca pisé un quilombo. Primero era muy pendejo y no me animaba, después me volví bolche y me di cuenta que el quilombo es la explotación del hombre (o más bien mujer) por el hombre llevado al extremo.
ResponderEliminaryo me afanaba cilindros de plasticina de la biblioteca de la Felipe Sanguinetti pa jugar a hacer macaquitos y otras boludeces...y utilería para las historias...
ResponderEliminaren las zanjas del cerrito mas precisamente sobre san martin habian grandes cerreras de palitos de madera haciendo las veces de barcos ...los dias de lluvia...no como hora que tienen saneamiento....señor....
ResponderEliminarEs richar.
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