El testimonio gráfico no nos deja mentir: el momento exacto en el que el Escribano extrae la bolilla número 54, que lamentablemente no había sido seleccionado por nuestra afamada audiencia. El calórico elemento ya ha sido guardado en el freezer, donde aguardará pacientemente para volver a ser sorteado el año próximo. ¡Gracias por participar y confiar en nuestros emprendimientos!
Nos cagó la vaca (el 54).
ResponderEliminarFalta que los elefantes jueguen al pingpong, y listo. Peñarol campeón.
ResponderEliminarlo habiamos dicho...
ResponderEliminarno hay duda que este escribano tiene mucho futuro.
ResponderEliminarPV si quiere tener futuro lo primero que tenemos que pedirle es que no sea escribano...
ResponderEliminarBueno me lo voy a tener que comprar nomás el güebo de pascua...
Que pinta de malandro ése escribano por favor!!!
ResponderEliminarSeguramente quien sostiene la bolsa (y que permanece en el cobarde anonimato) puso previamente a congelar las bolillas que poseían los números que no fueron elegidos por los participantes, y luego coimeó al escribano (con chocolate, nada menos!) para que extrajera una de las bolillas frías, y de este modo, agenciarse el suculento premio.
ResponderEliminarNo sé, yo tiro la hipótesis.
Yo podría dar fe de que el escribano es capaz de urdir todo el plan él solito y quedarse con la coima y el huevo eh!!!
ResponderEliminarYo iba a decir 54...
ResponderEliminarNo te veo comprando 100 loterías de mesa para tener 100 números 54 dentro de la bolsa, así que bueno, creeremos en el procedimiento.
ResponderEliminaryo para mi pienso de que igual me gané el premio por aproximación. yo dije seis y como todo el mundo sabe en orden decreciente va seguido de cinco, y luego cuatro que para abreviar lo ponemos 5 4 . osea que el seis es el número más cerca del 54 lqqd
ResponderEliminarrecuso el sorteo,nunca se vió fielmente el número de la bolilla y para peor el escribano largó la risa al cantar el 54,por favor!!! todo muy sospechoso,es más,no se si el chocolate que comía no era del premio a sortearse.
ResponderEliminarCómo que no? Se ve claramente, zorro, no seas malo. Y doy fe de que lo hicimos de primera, y que ni siquiera tenía la lista de los números que habían sido solicitados como para sacar esas bolillas previamente. Es mucho más de lo que le exigen al kini, por ejemplo.
ResponderEliminarPa mi que ese escribano se recibio en el Ins. Universitario Punta del Este.
ResponderEliminar